de los Bemberg, el lugar preferido por los hijos de Otto Sebastián Bemberg cuando visitaban la fábrica para realizar almuerzos y reuniones con empleados, familiares y amigos. Manuel Bautista que entró a trabajar a la Cervecería a los 14 años en 1921 y permaneció 40 años en la empresa, era bombero interno y se le encargaba hacer guardia en el parque y asistir a los Bemberg en ese chalet cuando era necesario. Fue, durante la mayor parte de su vida. el jardinero mayor y
superintendente del Parque, bajo la dirección directa de Federico Eduardo Bemberg, don Francisco Naranjo, nacido en las Islas Canarias, casado con Juana Almeida, también de origen canario, pero de antiguo arraigo en Quilmes. Allí vivieron en una vivienda que fue demolida en 1991 (circa) con sus 9 hijos: Brígida (luego de Castro) Juana, [3] María Elena (luego de de La Serna), Delia, Francisco (casado con
Margarita Guerrieri), María Inés, [4] Enrique, Jorge y Victorio. Todos los varones trabajaron en la Quilmes, en la sala de máquinas y las mujeres en la Tapa Corona, salvo Delia que era empleada en Ducilo y María Inés que ayudaba a su madre en las tareas domésticas que requería tan numerosa familia. Enrique Naranjo administró durante varios años el restaurante del Parque en sociedad con el señor Cali. María Inés Naranjo de Reynoso vivía en la casa de la Villa Nº 132.
se levantan en el parque, incluso plantó algunos, los que cuidaba personalmente con un mameluco azul y un sombrero de paja de alas anchas, con la dirección de un ingeniero japonés que murió trabajando y lo velaron en el mismo parque en su vivienda que estaba detrás del buffet.
Entre los árboles existentes los más curiosos son una acacia de Australia, un ciprés calvo, un ginkgo biloba de Siria, un pino Spruce y un roble de los pantanos traído de La Florida, EEUU. Entre ellos
se paseaban horondos y libres media docena de pavos reales y algunos faisanes, que eran la curiosidad de todo Quilmes. Cada árbol tenía a sus pies un taco de madera clavado en tierra con una placa de bronce que reseñaba el origen y familia vegetal a la que pertenecía cada árbol. Con los años quedaron sólo los tacos, próximos los festejos de los 120 años de existencia, la empresa volvió a colocar dichos mojones botánicos.
En 1953, al nacionalizarse la empresa, siendo director del
[1] Ver foto en “El Sol” del 27/3/53 Año 26 – Nº 6677
[4] María Inés Naranjo, luego de Reynoso, nació en ese parque el 4 de noviembre de 1917, en 2012 tenía 95 años. Tuvo dos hijos varones Godofredo Omar y Juan Carlos y cinco nietos. Integró el equipo de basket femenino del Club de los Obreros Cerveceros, entre las que también figuraron Eglantina y María Victoria Agnelli Morino. El entrenador era don Ángel Biotti y las hacía competir con el equipo del Club Quilmes.