En 1878, la Unión Tipográfica realizó la primera huelga en la historia de nuestro país, en lucha contra la jornada de 12 hasta 14 horas diarias que tenían los trabajadores, las condiciones de salubridad, el trabajo de niños y mujeres y los salarios insuficientes. Después de 1880 se crearon las sociedades de panaderos, carpinteros y yeseros.
En 1882, inmigrantes alemanes crearon el Club Vorwarts de fundamentos socialistas democráticos que originaron el socialismo argentino. En 1887, se creó La Fraternidad.
La Sociedad de Resistencia de Obreros Cerveceros de la Quilmes y Anexos se crea el 16 de julio de 1932. El 9 de agosto se designó la primera comisión administrativa; tenía como secretario general a Felipe Montiel. El 11 de setiembre, cambió su nombre por Sociedad de Obreros Cerveceros de la Quilmes. Una de las cláusulas fundacionales era que el sindicato no estaría embanderado con ningún partido político ni ideología. [1] Luego ocuparán un edificio de la empresa construido por la empresa sobre la calle Olavarría, aún en existencia.
La biblioteca fue incorporada a la Ley Sarmiento de Bibliotecas Populares el 7 de marzo de 1933. En Hudson, la Maltería, también contaba con una biblioteca.
Si bien se insistía en prescindir de cualquier enrolamiento político era evidente su compromiso con la causa popular; se pronunciaba por la libertad de los trabajadores como integrante de la Unión Obrera Local; por la paz, ante la guerra entre Paraguay y Bolivia y por la democracia ante el fascismo que amenazaba la República Española y la amenaza nazi en Europa y sus remedos criollos.
El 16 y 17 de julio de 1938, en el segundo Congreso Ordinario que realizó la Federación se resolvió cursar un telegrama de adhesión al gobierno de la República Española, haciendo votos por la restauración de la paz y la conservación de la democracia. Esta adhesión fue respondida por el presidente del Consejo de Ministros Juan Negrín [2] por medio de un telegrama el 1º de agosto de 1938. Además, los obreros cerveceros de Quilmes habían hecho en marzo de ese año, colectas reuniendo $ 849,30 que se enviaron a la España republicana, 149 cajones de corned-beef, en el vapor “Alsina” que salió del puerto de Buenos Aires el 1º de mayo. Y más adelante se enviaron a la Central de Amigos de la República Española, 1417 kilos de café, embarcados con destino a la España
Entregaba subsidios en efectivo de hasta $ 100 a los obreros enfermos. Se dictaban cursos y conferencias sobre higiene y
legislación laboral. Se formó un grupo filodramático, grupo teatral que realizó numerosas representaciones.
En la década del `30 la Sociedad logró de la patronal que se reglamentara el horario de trabajo, que se dotara a los obreros de ropa y calzado de trabajo, y que se disminuyera el horario de quienes hacían tareas insalubres, entre otras cosas.
El 13 de agosto de 1935, los operarios y operarias de esa fábrica habían fundado la Sociedad de Obreros y Obreras de las Tapas Coronas. Los primeros asociados fueron 63 obreras y 15 obreros.
Obreras de la Tapas Coronas en el recreo de los Obreros Cerveceros de La Ribera |
Esas mujeres de la Tapas Coronas fueron las primeras luchadoras sindicales que tuvo Quilmes, de las que, lamentablemente, no quedaron constancias fidedignas, salvo la memoria de la gente.
Había una caja de Socorro Social con la finalidad de evitar las listas de suscripciones y crear un fondo común de prevención a fin de prestar ayuda en caso de fallecimiento o enfermedad. Los asociados pagaban una cuota mensual de $ 0,50 (el sueldo mensual en 1937, era de aproximadamente $100) y una vez al año se hacía la donación del jornal de un día. También se juntaban fondos por medio de fiestas, bailes y comidas.
Durante los años de la expropiación estatal tuvieron significativa actuación en el gremio cervecero Juan Carlos García y Dante Sívori; en los últimos años fue una figura referente el dirigente cervecero, José Luis Nacho Lagar.
[2] Juan Negrín López fue un médico fisiólogo y político español, Presidente del Gobierno de la II República entre 1937 y 1945, ya en el exilio. El caso de Negrín es atípico en la política española