sábado, 30 de julio de 2016

CALLES DE QUILMES, DEL PROGRESO A HUMBERTO PRIMO - 1900

QUILMES MONÁRQUICO

“Las instituciones las hacen los hombres;

los hombres pasan y las instituciones quedan…

siempre y cuando no se la lleven los hombres”
En el censo de 1859, la población de Quilmes, en su planta urbana, 144 manzanas, era de 1.586 habitantes.  Todo el partido, que entonces incluía a Berazategui y Florencio Varela, tenía 6.809, de los cuales el 15,9 % eran italianos y de otras nacionalidades el 15,7%. Con el arribo de ferrocarril Buenos Aires–Ensenada que instaló el Ing. Wheelwright en 1872, la población aumento
extraordinariamente; la gran mayoría eran inmigrantes, sobre todo italianos del norte, que se sumaron a los genoveses existentes desde 1850, año más año menos, además de vascos, españoles de las Canarias y de otras regiones ibéricas, franceses y de algunas nacionalidades más. Pero la colectividad que pronto se instaló como clase dirigente fueron los vascos del Iparralde y los italianos: genoveses, piamonteses, lombardos de Mantua, [1] toscanos.
Durante esta etapa se fundó la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos “Cristoforo Colombo” en 1878, con 88 asociados en su mayoría noritálicos; esto lo clarifican estadísticamente los historiadores María del Carmen Aizpurúa, Mercedes Martínez de Vázquez y Jorge H. Levoratti, en el segundo Boletín publicado por la Junta de Estudios Históricos en 1987. [2] 
CONTEXTUALIZACIÓN 
Pero veamos que pasaba en ese entonces en la “Bella Italia”. El 9 de enero de 1878 (el mismo año en que se fundó en Quilmes la Sociedad Italiana), tras la muerte de su padre el rey Víctor Manuel
II, Humberto de Saboya se convirtió en rey con el título de Humberto Iº de Italia y no como Humberto IVº de Saboya, que le correspondía por tradición, con el fin de reforzar su imagen como soberano efectivo en todo el Reino de Italia y no sólo de Piamonte-Cerdeña. 
Había nacido el 14 de marzo de 1844, en Turín y bautizado como Umberto Rainerio Carlo Emanuele Giovanni María Ferdinando Eugenio de Savoya Habsburgo Lorena, príncipe del Piamonte. Fue el primer rey de la Italia unificada.
Durante su reinado la Península se unió a Alemania y al imperio Austro-Húngaro, formando parte de la ‘Triple Alianza’. A razón del dominio que este último Imperio (que ya se había quedado con
Trento, el Véneto y Friuli) ejerció en el norte de Italia, la decisión del monarca italiano no fue respaldada por la opinión pública, sobre todo por la burguesía mercantil surgente, y comenzó a restarle popularidad (su madre María Adelaida de Habsburgo Lorena era austríaca y en esas épocas los asuntos de una única familia repercutían en toda una nación) También en Quilmes, entre algunos piamonteses, esto no se veía con ‘buenos ojos’. 
La política exterior italiana bajo su reinado fue expansionista, intentando participar del imperialismo colonialista con que otras potencias europeas caían sobre África (colonialismo que hasta hoy en día sumió en la miseria a la mayor parte de las naciones de ese continente)

Humberto y Margarita
En lo interno, Humberto ejerció una política fuertemente conservadora, hostil a los sindicatos obreros que surgían en las ciudades industriales del norte de Italia. La cima de esta crisis se produjo en mayo de 1898. En Milán hubo masivas protestas populares por el alza en el precio del trigo e impuestos nuevos que gravaban principalmente al proletariado urbano (tasas destinadas, en mayor porcentaje, a las fuerzas armadas al servicio del colonialismo)

Las protestas, por órdenes del Rey, fueron reprimidas de manera sangrienta en las calles milanesas por el ejército, empleando la artillería contra manifestantes desarmados, dejando un saldo de centenares de asesinados. Por supuesto que entre estos había parientes y amigos de muchos inmigrados al Río de La Plata; otro baldón sobre Humberto.
Este desgraciado suceso pasó a la historia como “La Masacre de Bava-Beccaris”, apellido del general que tuvo a sus órdenes la
represión, quien luego fue convocado por el Rey en Roma y condecorado públicamente con honores por su "valentía en defender la Casa Real", acusando a los obreros de "enemigos de la Corona" (suceso algo semejante al del malhadado represor coronel Ramón Falcón, de cuyo nombre limpiamos los quilmeños una plaza) 
Estos acontecimientos deterioraron aún más el respaldo popular hacia Humberto; quien envalentonado no cejó en su cometido de generalizar la coacción violenta contra los obreros y así pasó a ser el blanco de la propaganda socialista y anarquista.
En julio de 1900, el detestado Humberto acudió a la ciudad de Monza, en Lombardía, a un evento deportivo y el día 29 de ese mes, tras una cena de gala en la Villa Real, el anarquista Gaetano
Bresci [3] irrumpió en la residencia y mató al monarca con cinco disparos de revólver. 
Las desgracias de esta familia no terminaron con el asesinato de este Rey. Con el nombre de su segunda hija Mafalda de Savoya fue bautizado una importante buque de pasajeros, el “Principessa Mafalda” que se hundió frente a las costas del Brasil el 25 de octubre de 1927, muriendo 481 personas, entre ellos varios argentinos. Fatalmente, esta mujer morirá el 27 de agosto de 1944, en un campo de concentración nazi, por su manifiesta oposición a la penetración alemana en Italia. 
DESAVENENCIAS PÓLITICAS
La italianidad quilmeña no fue ajena a los hechos arriba mencionados y, como en toda institución formada por humanos: asociación, agrupación, centro, club, comisión o como quieran
llamarse, se produjeron conflictos (esto pasó ayer y pasa hoy y pasará siempre desafortunadamente) porque los aconteceres políticos y sociales de sus países de origen no les pasaban desapercibidos y se involucraban en ellos como si aún residieran en sus terruños natales y los manifestaron con esa pasión vocinglera que ponen los italianos en todas las cosas. El asesinato de Humberto produjo desinteligencias en la “Cristóforo Colombo”: humbertistas, anarco-socialistas, liberales republicanos comenzaron una disgregación activa (una grieta).
Así escribió en “Un nombre para la Historia de Quilmes”, el Dr. Carlos Eusebi: [4] “Basándonos en los documentos que hemos reseñado podemos establecer los siguientes puntos: a) Desde 1892 a 1897, hubo serias luchas intestinas dentro de la institución; b) Estas desavenencias provocaron casi seguramente la disolución de la Banda de Música y la incorporación de algunos de sus integrantes a la Banda de la ‘Sociedad Unión Artesanos de La Colonia’ (liderada por don Santiago Valerga) y en 1897, a la banda de la ‘Società Filarmónica Volontari di Gari­baldi’, que se transformó en 1907, en los Bomberos Voluntarios de Quilmes; [5] c) Estas mismas luchas casi seguramente provocaron la efímera creación de la “Società Elena de Montenegro” y en 1900, dentro de la misma zona de influencia, de la “Società Italiana Di Mutuo Soccorso Patria E Unita”. 
TENDENCIAS 
La Cristoforo Colombo era oficialista, aceptaba el gobierno
constituido en Italia, eran el grupo de inmigrantes más afincados. Los Artesanos de La Colonia tenían una tendencia hacia el liberalismo republicano. Los Volontari de Garibaldi, liberales monárquicos ‘antihumbertistas’. [6] Los ‘montenegrinos’ se oponían a la casa de Savoya y veían en la princesa Helena Petrovic-Njegos, luego reina Elena de Montenegro, a una líder ultraconservadora y anexionista (protofacista), pero entre estos últimos reinaba (monarquicamente hablando) una gran confusión. Y Patria e Unitá eran pro-socialistas. 
DEL ‘PROGRESO’ A ‘HUMBERTO PRIMO’ 
En Quilmes, era por segundo año consecutivo intendente don Joaquín R. Amoedo, que lo había sido en 1897, sobrino de don
Felipe Amoedo que, a su vez, había ejercido esa función ejecutiva desde julio de 1886, hasta fin de ese año; fue el primero que asumió con el título de ‘intendente’, designado por el Poder Ejecutivo, en julio de 1886 y había fallecido en enero del mismo año que nos ocupa. [7] 
Oficialmente las autoridades nacionales y provinciales se condolieron por la fausta noticia que cruzó el Atlántico; se enviaron condolencias al gobierno italiano y a la familia real; se hicieron obituarios en todos los medios de prensa (ver revista “Caras y Caretas”), salvo, por supuesto, en los anarco-socialistas que presentaban la noticia como una respuesta a la violencia oficial que habían desatado sobre las clases populares.
Así se había obrado oficialmente en 1888, tras el fallecimiento de
Giuseppe Garibaldi  y en Quilmes se le dio el nombre del ‘héroe de Caprera’ a la calle Nº16, paralela e inmediata a la calle Progreso. 
De modo que, ante las divergencias entre las distintas instituciones italianas, Amoedo acordó con el concejal Sanders y este con los concejales Cipriano E. Benavente, Ramón Dapena Victoriano Huisi, Belisario C. Otamendi y Alberto M. Sanders, seguir la línea adoptada por el gobierno Nacional, pero un tanto tibia para que no ardiera el pueblo todo; mientras que los concejales Eduardo Clark y Zoilo Rosso se declararon prescindentes y Juan Bracco, Juan P. Pérez y Olegario Ponce de León, el día de la votación, se ausentaron con licencia por diferentes motivos.
ACTAS DE LA SESIÓN DEL 26 DE AGOSTO DE 1900 Presidente del HCD Victoriano Huisi; concejales Ramón Dapena, Cipriano E. Benavente, Alberto M. Sanders, Belisario C. Otamendi. Ausentes Juan Bracco, Juan P. Pérez, Olegario Ponce de León.
Cambio de nombre de la calle Progreso por Humberto Primo por moción del concejal Sanders en memoria del malogrado rey de Italia Humberto Iº. Fue aprobada la moción coincidiendo que ese mismo día la colectividad italiana realizaría una manifestación de condolencias en memoria de dicho monarca asesinado en Monza, por lo cual el HCD se asociaría a ella designando con el nombre del soberano a la calle Progreso. [8]
La manifestación organizada para emplazar con su nuevo nombre a la calle Progreso, ex Nº18, y descubrir una austera placa referida al hecho, transcurrió sin turbulencias, salvo algunos huevos que
salieron disparados de ciertas casas y silbidos que se oyeron mientras el señor Amoedo dirigía compungidas palabras a los asistentes, elogiando la persona del malogrado monarca. 
Colocar la placa también requirió de sesudas argumentaciones. Correspondía colocarla donde la calle nacía, que era frente a las vías del ferrocarril - aunque del otro lado de las vías las calles aún llevaban los mismos nombres que al Este -, pero salvo un galpón en la esquina SO de Gaboto y la ex Progreso, no había construcciones.
Se pensó en colocarla en una de las esquinas de la actual Hipólito Yrigoyen (ex 11 de Setiembre, ex Centenario, ex Uriburu), en la SO había un baldío; en la NO estaba el molino de la quinta de los Badaracco, en la SE la casa del arenero Domingo Bacigalupo y en la NE la fábrica de empanadas de Cástor Meals que fue la premiada con la placa bautismal ya que era una construcción que se preciaba apropiada para un rey, aunque Meals, hijo del maestro Félix Meals, de itálico no tenía nada. 
Algunos de los vecinos de la arteria que estuvieron en tal ceremonia
fueron: los mencionados Meals y Bacigalupo (ofendido pues él sí era italiano) don Gerónimo Lavaggi, Higinio Palacios (quien se decía testigo del asesinato del juez de paz Paulino Barreiro en 1840), don Ramón Castaño, Marcelo Loredo (quien apacentaba sus equinos en la plaza Gral. Pinto y decía que era suya) el ‘tachero’ (de tachos) Nicolás Torre, el panadero Alfonso Alonso, don Antonio Benedetti, que tenía una zapatería en la nueva Humberto Primo y Brown, el carrero Ciriani, don José González, el panadero Tassano, don Celestino Risso, Domingo Fressone, el Dr. Civelli, Nemesio Cabral, los Ponce de León, los Ducca, Juan Zini, el bolichero Mortola, el carnicero Ciríaco Sánchez, el albañil Breti, los Craviotto, doña Flora Rosas de Sosa, el cochero Lisandro Godoy, el pintor Pedro Zanoti, Pastor Del Valle (pariente de Aristóbulo), los Coquibus, los Vivas, los Paterson, el Dr. Fermín Rodríguez, Mariano Vázquez, Fortunato Sosa, los Bossi, Pedro Crubellati, Pedro Conio, y otros pocos, pues la población era escasa aún. 
CALLE DE QUILMES 
Esta es la historia de una calle de 116 años, dentro de los 350 que este 2016 cumple Quilmes; una historia cargada de hechos cruciales para Italia, para Europa toda y por espejo para Argentina. Una historia donde lo social, lo político y la geopolítica, lo económico, la guerra y la paz, el humor de las mujeres y de los hombres, sus miserabilidades y virtudes se entremezclan a lo largo de, aproximadamente, 30 cuadras.
Investigación Prof. Chalo Agnelli
ex Secretario de la Comisión de Cultura de la Sociedad Italiana
FUENTES 
Eusebi, Carlos A. M. “Un nombre para la historia de Quilmes” Ed. Tiempo Sur. Quilmes 2003.
Schbib, Claudio. “Fuego y Agua”. Ed. Tiempo Sur, Quilmes, 2000. 
Archivo de la Biblioteca Pública Municipal D. F. Sarmiento
Fotos: A.G.N.
NOTAS

[1] Mantua fue nombrada "Capital de la cultura italiana 2016".
[2]Presencia de la inmigración italiana en Quilmes (1869 – 1914)” Boletín Nº 2, Quilmes, 1987. Pp. 162 a 177
[3] Bresci nació en la Toscana y emigró a los EEUU, residiendo en Paterson, Nueva Jersey donde existía una gran comunidad italiana. Fue co-fundador de “La Questione Sociale”, periódico anarquista publicado en idioma italiano editado en Paterson. Según la feminista y anarquista italiana Emma Goldman: “Era un hábil tejedor, considerado por sus empleadores como un serio y aplicado trabajador, aunque le pagaban tan solo 15 dólares por semana. Tenía un hijo y una esposa que mantener; se las arreglaba para hacer sus contribuciones económicas semanales al periódico. Había ahorrado 150 dólares que se los había prestado al grupo en un momento crítico de La Questione Sociale. Sus noches y domingos libres acostumbraba a colaborar con el trabajo en la redacción del periódico y con la propaganda. Era muy querido y respetado por su dedicación a todos los miembros del grupo.” 
[4] Pp. 58 y 59 
[5] Ver en EL QUILMERO del viernes, 16 de mayo de 2014, BOMBEROS VOLUNTARIOS DE QUILMES – CALLE GARIBALDI - VIDEO DE ALEJANDRO RE

 Ver en EL QUILMERO del viernes lunes, 10 de octubre de 2011

102 AÑOS DE LOS BOMBEROS VOLUNTARIOS DE QUILMES - "FUEGO Y AGUA" DE CLAUDIO SCHBIB

http://elquilmero.blogspot.com.ar/2011/10/102-anos-de-los-bomberos-voluntarios-de.html

[6] Por el sometimiento que el rey zanjó con la casa de Austria, lo que no fue motivo para que tras la invitación de la Cristóforo Colombo a los actos de homenaje a Humberto Primo el 12 de agosto de 1900 en la Capital Federal, la banda concurriera el 26 en uniforme de gala y el luto imprescindible. Así de mutable fueron siempre las personas... por lo general... “Un nombre para la historia...” Pág. 49 
[7] Ver en EL QUILMERO del domingo, 24 de julio de 2011, FELIPE AMOEDO - EL NOMBRE DE TU CALLE
[8] Libro de Actas del H.C.D. 1900 - Biblioteca Pública Municipal D. F. Sarmiento.

domingo, 24 de julio de 2016

MUSEO HISTÓRICO FOTOGRÁFICO DE QUILMES 1986 - 2016

º

Este año el Museo Histórico Fotográfico Gerónimo Irma Giles y
Gaete de Mayol, cumple 30 años y se conmemoró su fundación con una muestra fotográfica de uno de los más relevantes fotógrafos quilmeños don Carlos Scott a quien la Biblioteca Popular Pedro Goyena, el 16 de marzo de 2013, rindió un tributo a su trayectoria[1]
UN POCO DE HISTORIA 
En el año 1666, en una fecha que no se puede precisar con la certeza que dan los documentes, se creó la Reducción de la Santa Cruz de los Quilmes con el extrañamiento desde los Valles Calchaquíes de los pueblos quilmes y acalianos.
El 14 de agosto de 1812, la antigua "Reducción", tras 140 años de
existencia, queda extinguida y declarase a Quilmes pueblo libre por un decreto del Primer Triunvirato; Iniciándose de Inmediato un
marcado proceso de evolución y un sostenido progreso.
El 2 de abril de 1852, Quilmes comienza su desmembramiento separándose del Barracas al Sur (Avellaneda) El primer Juez de Paz fue don Andrés Baranda, con la dimensión de prócer para nuestra historia. El 2 de agosto de 1916, el casco urbano del partido de Quilmes fue declarado Ciudad por la ley 3627 del gobierno de la Provincia. 
Gerónima I. Giles y Gaete
INICIATIVA 
En oportunidad que se realizó en el Club Social una exposición de innumerables fotografías sobre todas las épocas de Quilmes, de la colección del imperecedero don Alcibíades Rodríguez, el fotógrafo de mayor renombre local por su larga y fecunda labor en imágenes fotográficas que recorren toda nuestra historia. La inesperada afluencia de público fue tal que  inspiró a doña Gerónima Irma Giles y Gaete de Mayol (2) a donar la antigua vivienda familiar en 25 de Mayo 218, donde ella se había criado, para crear un museo fotográfico.[3] Su familia ya tenía más de 400 años de arraigo en el distrito, como descendiente de Pedro de Izarra, de su hija Polonia y el marido de esta Gaspar de Gaete; así como de la familia Giles emparentada con don Andrés Baranda fundadores de San Andrés de Giles. Transmitida su idea a don Alcibíades, este no cejó en dudar y la acompañó en la memorable empresa.
NACIMIENTO DE UNA ESPERANZA
 El diario “El Sol” con fecha 5 de marzo de 1982, en su N° 18.874, planteaba la necesidad de crear un Museo Fotográfico; enumerando una serie de muestras fotográficas, incluyendo la de los reporteros gráficos de "El Sol” y la de Alcibíades Rodríguez. Culminaba diciendo “Quizás esta nota sea el nacimiento de una esperanza que algún día, no tan lejano se concrete. Esperamos sea una inminente realidad”. A solo siete días de esta publicación, se presenta otra, en el mismo diario, con el siguiente titulo alentador: “El Museo Fotográfico será realidad”, en la cual se transcribía una carta enviada a este medio por Doña Géronima Irma Giles y Gaete de Mayol, la cual daba como primicia que: "Después de leer la nota exhibida en su prestigioso medio, he decidido donar a la Subsecretaría de Cultura de la Municipalidad local un inmueble ubicado a escasos 800 metros de la estación ferroviaria, la propiedad tiene una antigüedad de 110 años y es voluntad de mis fallecidos padres, que no sea vendida; lo que me otorga la inmensa satisfacción de cumplir con sus deseos y darla en donación a la Municipalidad y al pueblo quilmeño para concretar el Museo Fotográfico a perpetuidad, no pudiendo dársele otro destino”.

COMISIÓN PRO-MUSEO

Inexplicablemente las autoridades municipales rechazaron la donación, lo que movilizó a los vecinos desconcertados e incrementó la decisión de los organizadores. La respuesta no tardó y se formó una comisión Pro-Museo presidida por el arquitecto Claudio Reinke. Entre los miembros se destacaron: Enrico Lanza, conocido industrial fotográfico quilmeño; el ingeniero civil Luis Antonio Casabona Aranda, el Prof. Ariel Bucich y su esposa Cora Otamendi y, por supuesto, doña Géronima y Alcibíades. Así se logró que el 11 de mayo de 1985, se realizara una reunión fundacional del Centro de Investigadores sobre la Fotografía Antigua en la Argentina, denominada “Dr. Julio F. Riobó” en la sede del Club Social de Quilmes.

MÁS DIVERGENCIAS
 Como todas las buenas ideas con un fin del bien común siempre tienen sus detractores, algunos por el solo hecho de “estar en contra”. A poco de iniciados los trámites para concretar esta donación con su consecuente creación del museo, surgieron diferencias que el periódico “El Periodista” especifica en una nota del miércoles 29 de mayo de 1985
ENCONTRADAS OPINIONES SOBRE EL MUSEO FOTOGRÁFICO

Varias contradicciones se siguen suscitando con respecto al caso de la do­nación por parte de la Se­ñora Gerónima Giles y Gaete de Mayol del inmue­ble (cito en la calle 25 de Mayo N° 218), para la creación de un museo fo­tográfico. El mismo sería el primero en Argentina y el segundo en Latinoamé­rica.

Con fecha 26 de octu­bre de 1983 en el despa­cho del señor intendente (G. Valenzuela) se firmó la escritura traslativa de dominio ante el escribano Ithuralde y varios testigos.

Según documentos ela­borados en los meses subsi­guientes la señora Giles de Mayol y el señor Otto Reinke (presidente de la comisión pre-museo) mani­festaron “no haber recibi­do ningún tipo de notifi­cación oficial o extra-ofi­cial acerca de la habilita­ción del Museo en el tér­mino establecido”.

El sábado 11 de mayo se reunió la comisión pro­-museo a la cual asistieron historiadores fotográficos; en la que estuvo ausente el bloque radical.

Según declaraciones del concejal E. Giménez del bloque justicialista renova­dor el 28 de diciembre pa­sado se votó la suma de $ 950.000 para reparacio­nes, y sólo faltaría la inauguración pero “la última palabra la tiene el Inten­dente”. Agregó al respecto “que los trámites legales ya se cumplieron”. Giménez atribuyó la tardanza de la apertura del museo a negligencia o celos políti­cos (por tratarse de un proyecto justicialista), aunque no cree que ésta sea una actitud tomada en conjunto por el bloque ra­dical.

Calificó también como dilatorio el trámite del nombramiento de un re­presentante por parte del intendente Lic. Eduardo Vides y otro de la señora de Mayol, para po­sibilitar el diálogo entre la donante y las autorida­des comunales.

El concejal manifestó que el Museo posibilitará que la gente y en especial la juventud, puedan revi­vir el ser nacional a través de las fotos. Y que lo que más le duele a un país no es la pérdida de la eco­nomía, sino la de la cul­tura. Este proyecto tiende a recuperar lo perdido. Finalizó diciendo que “esto ya no lo para na­die” si la inauguración no es el 25 de mayo será el 9 de julio.

BLOQUE RADICAL

Hebe Portos de Negri, concejala del Bloque Radi­cal dijo que hay que establecer un orden. El Museo “es importante pero no prioridad”. La concejala declaró que otro de los problemas es que no se donan los negativos. Aclarando que un museo sin los mismos, ca­rece de valor.

Al consultar al Secreta­rio de Gobierno, señor Ferrari, señaló después de que el Consejo sancionó la ordenanza aprobando la donación no se asignó una partida para las reparacio­nes de la casa. En conse­cuencia se produjo una de­mora, que sobrepasó el plazo de un año dado por la señora de Mayol. Por lo tanto la misma revocó la donación ordenando no in­novar en el inmueble.

El funcionario añadió que el municipio pondrá toda su buena voluntad para solucionar el proble­ma pero necesita que la donante levante la revoca­ción.

Presentado el caso que­da planteado un interrogante: ¿cuál es la VERDA­DERA causa por la que, después de dos años, no se ha inaugurado aún el Mu­seo Histórico Fotográfico de Quilmes? Tal vez sea por negligencia, por celos políticos, o un proyecto para tratar en tiempos me­jores, pero la solución a este problema sería qui­zás, un diálogo más fluido entre las partes dejando de lado los intereses políticos.



Sin embargo, muchos más se sumaron a la causa y acompañaron a doña Gerónima y a don Alcibíades; caracterizados militantes de la historia, del arte y de la cultura quilmeña, como: Eduardo Vides, Claudio Schbib, Carlos Scott, Rodolfo Malaver, Jorge Raúl Calvo, Julio César Agnetti, Fernando San Martín, Rosa Massone, Salvador Masitto, Ely Fontana, Néstor Rotelo, Jorge Luis Rodríguez Lizza y donaciones de los familiares de don Alcibíades, sus hijos, de la familia de Santiago de La Fuente, de la Prof. Nora Mergasi, Ítalo Nonna, la Flía. Agnelli, el Foto Club Quilmes y muchos, muchos más. 
INAUGURACIÓN
 El día 5 de julio de 1986, se inauguró oficialmente el Museo, el primero en su tipo en nuestro país; se encuentra a 17 Km. de la Capital Federal, en el mismo casco urbano.
Durante el recorrido de las salas, la señora Gerónima Irma expresó: “Agradezco enormemente la presencia de ustedes en este acto y les ofrezco en nombre de mis antepasados esta humilde vivienda enclavada en esta mi patria chica que es Quilmes, a la que tanto le debo y quiero, elegida para vivir y morir en ella, con la seguridad de que aquí y desde hoy, bregaremos todos para que comience a escribirse la verdadera historia de este pueblo que tanto se ha prodigado para el engrandecimiento de la Nación. Los abrazo a todos con sincero afecto".

DESCRIPCIÓN DE LA CASA 
El formato de distribución en galería, era común para todas las casas de 1840, que mantienen la lachada [4] de tipo colonial, con techo de chapa a dos aguas, ventanas enrejadas y farolas de la época. En la zona se podían hallar varias casas, que al igual que esta, superaron los 100 años hasta que la cruel piqueta acabó con ellas; ocupa una superficie de 180 metros cuadrados y en la fachada se destaca la placa de mármol con la descripción de su fundación.


DECRETO PROVINCIAL 
El decreto N° 2152 del año 1988, el gobierno de la provincia de Buenos Aires, reconoce la iniciativa y por gestiones del director Sr. Enrico Lanza se declara a Quilmes, Capital Provincial de la Fotografía. 
En las salas del museo, se exhiben exposiciones permanentes y rotativas de fotografías que hacen al patrimonio del mismo, muchas de ellas gracias al aporte, principal de don Alcibíades y de todas aquellas personas que se acercan constantemente al museo con el objetivo de donar sus antiguas fotografías familiares.
EL MUSEO Y LA COMUNIDAD - CONTENIDO DEL ARCHIVO 
Este archivo fotográfico cuenta con más de 8000 imágenes, las que
permiten recorrer visualmente los orígenes y progresos de nuestra ciudad; que a partir de la llegada del ferrocarril en 1872, asegura el medio de comunicación entre Buenos Aires y Quilmes, facilitando el establecimiento de fábricas a la vera de sus vías.
 En 1873, hace su aparición el primer periódico local "El Progreso de Quilmes”, fundado por el Dr. Wilde, y gracias a sus páginas y luego a las de “El Quilmero” de Pedro Giménez, sabemos hoy, que un fotógrafo francés, Monsiur Bonnevide, se instaló en nuestra ciudad por varios meses, dedicándose a la fotografía retratística.
Guarda el Museo  importantes imágenes, cuyos negativos fueron heredados, de indudable valor histórico: la estación del ferrocarril Buenos Aires Ensenada, luego Sud, tal como era en 1873; el tranvía a caballo: la Rambla de 1910 el primer centro turístico del país; el equipo de fútbol del Quilmes Atheltic Club en 1889; el primer cuarteto musical conformado por auténticos criollos, etc.
EL MUSEO HOY 
En los últimos años el edificio, sumamente pequeño para la grandeza histórica que representa, tuvo favorables modificaciones que permiten realzar su contenido.  El material existente en el museo es diverso: esta compuesto por miles de Imágenes del siglo XIX y XX; actualmente las imágenes del archivo se encuentran en proceso de limpieza, ensobrado, copiado y reproducción de originales.
Monumento al fotógrafo donado por quien fue su director don Enrico Lanza
El museo mantiene una constante convocatoria a los habitantes de Quilmes, solicitando la donación o el préstamo de fotografía familiares o que incluyan paisajes, rincones del pueblo, etc., para su reproducción y así acrecentar el patrimonio. Recientemente se recibió una importante colección de la profesora Nora Mergasi, de vieja familia quilmeña, vinculada al viejo cine 'La Paz' del barrio La Colonia y al café-confitería 'El Nacional' de la calle Rivadavia. 
Además el museo ofrece a toda persona que se interese en la historia fotográfica del partido de Quilmes, la biblioteca “Prof. Juan Carlos Lombán” donde se pueden consultar valiosos títulos que hacen al pasado local. Y sobre la historia de la fotografía en Quilmes hay abundantes publicaciones que dan información completa y precisa, la del Prof. Fernando San Martín y la de Jorge R. Calvo.

FUENTE
Diario "El Sol"
Periódico "El Periodista"
Folleto del Museo Fotográfico
Compilación Chalo Agnelli
Fotos: Museo Fotográfico y Fernando San Marín

NOTA

[1] Ver en EL QUILMERO del jueves, 3 de marzo de 2011, Carlos Alberto Scott "Perpetuando la imagen" Y del sábado, 16 de marzo de 2013, “Carlos Scott, fotógrafo. Homenaje en la Biblioteca Pedro Goyena - Muestra de fotografías suyas e inauguración de las nuevas instalaciones de la institución fundada por la imperecedera Pola Manso.”

[2] Ver en EL QUILMERO del miércoles, 21 de septiembre de 2016, “Gerónima Irma Giles y Gaete de Mayol” (colaboración)

[3] Ver EL QUILMERO del sábado, 1 de noviembre de 2014, “Los Gaete y los Izarra - a lo largo y más allá de la historia quilmeña”
[4] lachada: Masa fina de cal, yeso o cemento mezclado con agua que se emplea para blanquear paredes o como argamasa para fijar ladrillos.