Chalo Agnelli
El sábado 24 de septiembre de 1926, invitada por los directivos y ex alumnos
de la Escuela Normal Nacional y patrocinado por la Institución se realizó en el
teatro de la Sociedad Italiana Cristoforo Colombo un recital poético de la educadora y afamada poeta Alfonsina Storni.
La acompañaba Adela García Salaberry, con quien según
habían acordado, subió al tren en Bernal, donde vivía, y juntas, a las 16 hs.,
llegaron a Quilmes. La esperaban en la estación con un gran ramo de flores la
esposa del intendente Ángel Levanti, la regente de la Escuela Normal Crescencia
López Oliveros de Molina con una delegación de alumnas, entre las que se
hallaban: María Indamira Arbert, Julia Astier, Celia Burmester, Alina Canessa,
María Antonia Casabona, Matilde Geronés, Elisa Grosman, Catalina Hollman, María
Amalia Morales Gorleri, Delia Salas, Ana María Tropeano, entre otras. quienes en emotivo cortejo cruzaron en diagonal la plaza Wheelwright
(hoy Hipólito Yrigoyen) rumbo al teatro.
En la escalinata la recibió el director José Sosa
del Valle, la presidenta de la Asociación Cooperador Silvia Cristy de Cella, que
le ofreció un ramo de rosas rojas, y un gentío que acompañó entre aplausos su
ingreso.
La sala estaba rebosante de público, la mayoría
mujeres de todas las edades: los palcos desbordaban, en los pasillos laterales de
la platea muchos permanecieron todo el recital de pie (entre ellos mi abuela y
mi madre de 14 años). Numerosas personas no pudieron entrar, pero la esperaron durante toda la duración del recital en la puerta del teatro.
Desde el escenario, adornado en el centro con un
sillón de tres cuerpos, un atril y canastas de flores; presentó a la poeta la
señora de Molina, destacando que el año anterior se había publicado su libro “Ocre” y que desde dos años atrás era profesora de Lectura y Declamación en la
Escuela Normal de Lenguas Vivas, y otros conceptos de su trayectoria, finalizada
la un poco extensa apertura, inmediatamente Alfonsina
apartó el atril e inició, con voz suave, pero contundente, con elocuente
entonación dramática, de memoria el recitado con un poema de su primer libro: “La inquietud del rosal”, y siguió con otros poemas de “Ocre”
y con uno, aun inédito de “Poemas de amor”, el poemario que se acababa
de publicar ese año. Dos veces intentó culminar, pero la intensidad de
los aplausos la obligaron a repetir algunos poemas como “Uno”, que se
publicó en el periódico local “El Plata” y 1934 formará parte de “Mundo de
siete pozos”, o sea que en Quilmes fue una primicia.
A la salida, Alfonsina fue ovacionada por el
público que la esperaba, aunque ya había anochecido, se la notaba
verdaderamente emocionada, pidió que acallaran los aplausos y recitó, desde las
escalinatas, dos breves poemas que fueron escuchados en solemne quietud.
La emoción creada por la fuerza y la sustancia de
sus versos persistió durante varios meses en la ciudad y motivó a muchos jóvenes
a incursionar en la poesía.
Compilador de memorias orales: Prof. Chalo Agnelli / 2006-2016
"Magazine Social A.B.S." de Dr. Emilio Mauri Casabal - 1926
Periódico "El Plata". 1926
Memorias: Adela García Salaberry - Filomena María de Baunelle y Martel de Yori (1881-1962) - Josefina H. B. Yori de
Tiscornia (ex Vda. de Agnelli / 1912-2008) - Ana Hutchison (1898-1989)