IDENTIDAD - PERTENENCIA - TRADICIÓN - INSTRUMENTO DE DIVULGACIÓN HISTÓRICA DEL PARTIDO DE QUILMES Y SU ZONA DE INFLUENCIA, DESDE MÁS ALLÁ DE SUS ORÍGENES EN 1666 CON LA COMPULSIVA LLEGADA DEL PUEBLO QUE NOS DIO GENTILICIO Y TOPONIMIA, LAS TRES FUNDACIONES, FRAGMENTACION POLITICA, ORIGEN Y DESARROLLO DE SUS INSTITUCIONES, BIOGRAFÍAS, COMENTARIO DE LIBROS DE AUTORES LOCALES Y TODA LA BIBLIOGRAFÍA REFERENCIAL QUE SURJA Y SE DESCUBRA... "NO SE AMA LO QUE NO SE CONOCE". CHALO AGNELLI
IDENTIDAD - PERTENENCIA - TRADICIÓN - INSTRUMENTO DE DIVULGACIÓN HISTÓRICA DEL PARTIDO DE QUILMES Y SU ZONA DE INFLUENCIA, DESDE MÁS ALLÁ DE SUS ORÍGENES EN 1666 CON LA COMPULSIVA LLEGADA DEL PUEBLO QUE NOS DIO GENTILICIO Y TOPONIMIA, LAS TRES FUNDACIONES, FRAGMENTACION POLITICA, ORIGEN Y DESARROLLO DE SUS INSTITUCIONES, BIOGRAFÍAS, COMENTARIO DE LIBROS DE AUTORES LOCALES Y TODA LA BIBLIOGRAFÍA REFERENCIAL QUE SURJA Y SE DESCUBRA... "NO SE AMA LO QUE NO SE CONOCE". CHALO AGNELLI
lunes, 24 de junio de 2013
CLUB DE PELOTA QUILMES 1919 - SEGUNDA NOTA
CARLOS CALZETTA – ACTOR DE CARÁCTER
Estas páginas de EL QUILMERO, presentan a José Andrés López, a Dora Barrera Nicholson de Ricagno, a Luis A, Setti, a Agustín Vigo Giai, a Leopoldo Russo, a Florencio Amoroso, a Norberto Martín y a muchísimos más en las incompletas reseñas de la historia teatral quilmeña. Pero hay una figura imprescindible, cuyo origen fue La Colonia y el libro que cuenta el barrio “delotrolaodelasvías”, presenta su biografía. Biografía que se trazó en vida de Carlos, con su aliciente y su cooperación. Lamentablemente no pudo verla impresa, pero nos dejó la memoria de su calidad humana y su arte insustituible.
Agregaré finalmente, para cerrar este acápite explicativo que del centenar de biografías que se hicieron y se publicaron para EL QUILMERO, el periódico "Perspectiva Sur" y los libros "Maestros y Escuelas de Quilmes", "La Colonia de Valerga", "Migraciones", "Cuaderno de Identidad I" y la de José Antonio Wilde en los últimos 10 años, tras entrevistas personales, tan sólo dos o tres, y esta es una, fueron tan ricas como experiencia de vida para quien suscribe, por la pasión, el amor, la sinceridad, la humildad superior, la gentileza y el reconocimiento hacia quienes los acompañaron en su carrera que mostró Carlos Calzetta
de "La Colonia de Valerga - El Segundo Barrio De Quilmes”
Cap. 9. Ed. Tiempo Sur, Quilmes, 2010
Nació en Quilmes el 14 de mayo de 1939 en la casa de sus abuelos paternos, frente a la plaza del barrio La Colonia en la calle Carlos Pellegrini 120 entre Vicente López y Aristóbulo del Valle. Su abuelo Eugenio Luis Calzetta, italiano, era herrero en la Cervecería.
Carlos es el mayor de tres hijos, dos varones y una mujer. Su padre fue Eugenio Luis, quilmeño nacido en la casa de sus tíos, la familia Sima, en la calle Tucumán entre Andrés Baranda y T. de Alvear, fallecido el 8 de agosto del 2004 a los 90 años. Su madre fue María Zulema Peralta, también quilmeña nacida en Bernal, hija de un español y una criolla de la tierra descendiente de indios tobas de apellido Cejas. Es indudable su arraigo a este Quilmes y a esta tierra argentina.
Su padre en 1940 instaló la carnicería que Carlos hasta hoy atiende y donde vive con su mujer Hilda Elena Rodríguez y en un departamento en el primer piso vive su hermano Miguel Ángel.
Fue de su padre, bandoneonista en la orquesta típica de Francisquín, que le brotó la afición artística.
Carlos hizo los estudios primarios en la escuela Nº 13 donde ya sacaba a relucir su vena dramática con su histrionismo y su extraordinaria memoria.
Tenía 17 años cuando un laborioso director del teatro local, Juan Carlos Veroli, lo descubrió e integró su elenco, “Bambalinas”. La primera obra en la que actuó en el personaje de Ernesto fue “No hay suegra como la mía”; en la Sociedad de Fomento “12 de Octubre” que se halla en Condarco y Corrientes. Era el año 1956. Luego siguieron obras como: “Juancito de la Ribera”, “El puñal de los troveros”, “Estancia Nueva”, “Mulato” (1974), “Ilusiones del viejo y de la vieja”, etc. En esos años el teatro en los barrios atraían mucho público de todas las condiciones sociales, pues eran muy pocos los vecinos que tenían televisor o que podían frecuentar los cinematógrafos del centro de Quilmes.
A su instinto dramático se le suma la cualidad de reconocer a sus directores como maestros y aprender en los ensayos de las puestas. Consideraba especialmente a: Norberto Martín, Leopoldo Russo y Alejandro Martín, a quienes estaba plenamente agradecido y lo remarcaba repetidamente;. y con Norberto Ferrando, compañero en las tablas, aprendió a manejar la respiración en escena.
Encarnó numerosos personajes en su extensa actuación. Protagonizó a Izquierdo, un militar para quien la muerte sólo es un accidente intelectualizable, en la obra “Montserrat” de Emmanuel Robles dirigida por Norberto Martín, director del elenco “Luz y Sombra” al que Calzetta se sumo en 1974. Participó de la puesta de “Arlequín” de Carlos Goldoni dirigido por Leopoldo Russo y el elenco del Grupo de Teatro Sur, al cual Calzetta perteneció desde su creación en 1974.
Bajo la puesta del mismo director y con el mismo grupo, en 1977, hizo el personaje de Marco en “Panorama desde el puente” de Arthur Miller, obra que tuvo un éxito irrepetible en Quilmes. El 14 de abril de 1979 iniciando la temporada teatral del Grupo Sur en la Sociedad. Italiana, integró el elenco de “El Organito” de los hermanos Discepolo, que gozó de una éxito insospechado. Y el mismo año continuando con las piezas teatrales de Armando y Enrique Discépolo actuó en el grotesco “Severio”.
En agosto de 1981 bajo la dirección de Veroli representó con extraordinario éxito, en el centro tradicionalista “El Rodeo”, el papel de Javier en la pieza de Alberto Novión,
“Bendita seas” (1981) En la temporada 1982/83 realizó el papel de Juan en “Los hermanos queridos” de Carlos Gorostiza dirigido por Norberto Martín con el elenco del “Luz y Sombra”. Entre esos años, un 6 de enero, bajo la dirección de Carlo Bassi Bruno, realizó el papel protagónico de “Cornudo, apaleado y contento”, en el hueco de la Galería Colón. En 1999 fue el Jacinto de la pieza “Ulf” de Juan Carlos Gené, junto a Marta Nigro, como Paloma, dirigido por Alejandro Martín y el elenco Municipal “Luz y Sombra”, con motivo de los cincuenta años de la formación de este grupo teatral quilmeño que hizo historia en la dramaturgia local. En ese protagónico Calzetta recibió destacada críticas en un encuentro teatral que se hizo en Ramos Mejía.
Carlos Calzetta fue galardonado como el mejor actor protagónico en Chascomús con motivo de la “8° Fiesta Teatral de Chascomús 1999”. La obra había sido preseleccionada entre 80 elencos de la Provincia, entre los que se encontraban los municipios de Azul, Luján, Necochea, Pehuajó, etc. En dicha preselección “Ulf” quedó entre los 11 elencos que representaron en Chascomús. La pieza se había puesto en el auditorio de la Casa de la Cultura durante seis meses con récord de público.
El 7 de agosto de 2004, en el 1° Encuentro Provincial de Teatro “Pilar 2004” con el elenco del grupo “El Partener” que dirige Leopoldo Russo hizo el papel de don Justo en la obra de Mauricio Kartún “Desde la lona”, con notable reconocimiento. También actuó en las obras “Fin de escena” y “Pic-Nic” de Gustavo Castignola, esta última con extraordinaria participación de público durante casi tres años consecutivos, en Casa de Arte “Doña Rosa”.
Suma a su trayectoria más de 40 obras. Entre todas ellas las que le dieron más satisfacción, por cuánto puso de si mismo, por cuánto aprendió y le dejaron huellas imborrables fueron “El Organito”, “Panorama desde el puente” y “Ulf”.
Su única hija, Miriam Beatriz, desde pequeña tuvo una notable capacidad musical. Debutó a los 15 años en “Grandes valores del tango”. A los 16 años, después de una prueba que le hiciera Edmundo Rivero, actuó en “El Viejo Almacén”. Hasta que un día abruptamente cortó definitivamente una carrera que hubiera llegado a ser detonante. Como administrativa municipal llegó al cargo de Jefa de departamento en la Secretaría de Hacienda.
A la creación artística sin aspavientos, Carlos Calzetta, sumó una humildad natural, don de gentes, sincera honestidad y honor que le granjearon el reconocimiento, lamentablemente mudo, de la comunidad quilmeña; en suma, su calidad humana es merecedora de recordar como modelo. Porque lo suyo fue el teatro amateur, no vivió del teatro si no atendía su carnicería no podía sostener su hogar, entonces a su tiempo de ocio, a su familia, le restaba interminables horas, días, fines de semana, de ensayo de preparar escenografías, de memorización de libretos, con el único fin de encontrar la felicidad y encontrarse sobre un escenario.
Como a Veroli, que hacía un teatro específicamente temático, y a Justo Francés pioneros del teatro local, en los denominados grupos filodramáticos, que nunca se les hizo un homenaje, tampoco Carlos Calzetta, asombrosa e injustamente, recibió ningún galardón a su trayectoria, de tantos que se entregan en nuestro Quilmes. Ni oficial ni particular. Sin embargo, sí lo fue en otras localidades de la Provincia y en el corazón de muchos quilmeños por el placer que Carlos les brindó pasando por esta vida.
El domingo 14 de agosto del 2005, día en que se conmemoraban los 339 años de la creación de Quilmes, Carlos Calzetta nos dejó para actuar definitivamente en los escenarios de la memoria. Tenía tan sólo 66 años. Los que tuvimos la irrepetible experiencia de ser su público, cuando seamos espectadores de obras en las que él jugó un personaje, no prodremos evitar verlo en nuevamente escena.
miércoles, 19 de junio de 2013
UN RASGUÑO EN LA HISTORIA DEL CLUB ARGENTINO DE QUILMES
Dr. Isidoro Iriarte |
Ex- Intendente Dr. José Edaurdo López (1927) |
Entre los mejores equipos de la barranca, dos hicieron época. El primero del año 1903, integrado por: Mariano, Manuel y Julio Castellanos; Pablo Carrilero, Isidoro G. Iriarte, José María, Alberto y Ricardo García, Jorge Mc Intire, el "Moto" Sagasti, Ghilini, Eugenio Pott y César López. El segundo equipo de 1950, estaba integrado por: Vaninetti, Sergio García, Piola Brunetti; Quevedo, Blanes, Freiré, Parachú, Rógora, Driollet y Martínez.
ANTIGUOS COMERCIOS DE QUILMES - “EL BAZAR 0.95” (colaboración)
Desde la época de su fundación en 1927, que comenzó a funcionar en un cuadrado de un metro, se podría decir, a la floreciente situación alcanzada en 1935, hay una diferencia que sólo pudieron valorizarla los que conocieron el movimiento que tuvo esta importante casa de comercio.
No sólo se pudo juzgar la importancia del Bazar 0.95 de Quilmes por lo que era en el año 1935, sino que era preciso conocer la cantidad de depósitos de mercaderías que existían en el interior del mismo. En más de una ocasión, el señor Venancio Dell’Aquila, procuró obtener edificios contiguos para realizar indispensables ensanches, sin éxito. Y no era aventurado cuando le pronosticaron al Bazar 0.95 “(…) muy en breve, la imposibilidad de atender a su clientela en el local actual”.
Un ejemplo de cuanto se decía, lo brindó el día de Reyes, ya que fue necesario destacar 32 empleados para atender al público concurrente, mientras otras casas del ramo estaban semivacías. Es que el público de Quilmes volcó decididamente su favor en esta casa, por su seriedad y también, por qué no decirlo, por sus precios más bajos que en ninguna otra. A este respecto se señalan anécdotas interesantísimas: En los primeros tiempos que el señor Dell’Aquila imponía el Bazar 0.95, la clientela, que estaba acostumbrada que para los clásicos días de Reyes le aumentaran de precio la mercadería, dudaba de la palabra del señor Dell’Aquila, de que iba a mantener los precios para ese día. Y finalmente, cuando comprobaron que era exacto, el vuelco del favor del público se hizo definitivo para el Bazar “0.95”, como era popularmente conocido. El público supo premiar el esfuerzo del señor Dell’Aquila que rompió viejas costumbres de aumentar los precios para Reyes.
Primeramente, fue la base de los negocios de esta casa los precios únicos de 0.95 y 1.95, pero más adelante y sin dejar nunca estas características, se agregaron al surtido artículos finos de bazar, ferretería y fantasías para regalos en general que eran adquiridos por el público constantemente, tanto por la selección y buen gusto de su dueño, como por los precios bajísimos a que eran vendidos.
Y no sólo en Quilmes el Bazar 0.95 tenía popularidad y fama. En Bernal y Berazategui, poblaciones vecinas a esta ciudad de Quilmes, la clientela de esa casa es extraordinaria y cada día iba en aumento. No fue exagerado cuando se pensaban que muy en breve la casa tendría que instalar servicios de camiones a domicilio. Ya en el año 1935 los repartos a domicilio, que aumentaban día a día, eran atendidos preferentemente y fue lo que destacó a esta casa de sus similares. El público de Bernal y Berazategui, tenía particularmente en cuenta esta situación que favoreció a dicho comercio.
El movimiento de este negocio fue grandísimo en 1935 y fue en creciente aumento, porque la honradez de las actividades fue comentada con extraordinario entusiasmo por el público, que confirmó el título de éstas líneas: “Una casa agrandada a base de honradez”.
El surtido en general de este Bazar 0.95, y eso sin hablar de sus precios inferiores, fue superior a muchísimas casas de fama de la Capital Federal. El público valorizaba este esfuerzo y lo declaraba a cada rato. Quienes tuvieron ocasión de comprobarlo lo decían con total sinceridad, “el Bazar 0.95 de Venancio Dell’Aquila, tanto por el éxito que lo ha coronado como por la honradez que lo caracteriza, es un orgullo para Quilmes y debe servir de ejemplo para el comercio en general que siguiendo las prácticas del mismo, se agrandará y tendrá el favor y la consideración del público, como justo premio a tantos sacrificios por servirle”.
Las secciones bazar y menaje eran de las más importantes de la casa y el surtido de ellas permitían al cliente una elección adecuada de acuerdo con sus gustos o los deseos de inversión. Don Dell’Aquila le prestaba el mayor de los cuidados a estos rubros, que eran la parte fuerte de su negocio; y el público al concurrir a surtirse a este negocio lo hacía conociendo el vasto surtido, precios y calidad de los mismos, lo que determinaba la reserva de pedidos de bazar y menaje al teléfono U.T. 490 Quilmes.
Para la temporada de verano el Bazar 0.95 iniciaba la venta de heladeras a precios extraordinarios, que llamaba poderosamente la atención del público. Igual criterio tomaba su propietario en todas las ocasiones que se producían ventas especiales, como ser: Día de Reyes, Carnaval, San Juan y San Pedro, etc.
Era un comentario de quienes conocían este comercio que “el mayor éxito de esta casa reside en la capacidad de compras que permite a su propietario obtener los mejores precios de plaza por el gran volumen, lo que en consecuencia le permite vender a precios inferiores a la mayoría del resto de los negocios del ramo”. Y proseguían, “si pensamos a lo que ha llegado en poco tiempo, difícil resulta predecir su gran futuro”.
Miembro de ASOCIACIÓN ORÍGENES BERAZATEGUI
Fuente: Crónica. Quilmes-Bernal. Núm. 619. Año 1935.
E-mail: jcgrassi1420@hotmail.com
LAS COCHERÍAS ESCOBAR Y ROVERANO POR JUAN CARLOS GRASSI
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24 de abril de 2015 Víctor Ernesto Roverano – Un
artista, un museo, una casa…