Las Sociedades de Ayuda Mutua - que se proponían entre - sus fines primordiales la protección, la educación y la beneficencia - fueron las más importantes de las instituciones de inmigrantes.
Los italianos ingresaban a ellas, en un número mayor que a otra organización. (3)
Fue a través de ellas, como también por intermedio de - las escuelas y del periodismo, que los itálicos difundieron el ideario Mazziniano-Garibaldino (4), fundamentado en el republicanismo, la unión, la fraternidad, la caridad y la cultura laica.
En 1858 surgió en Buenos Aires, la primer asociación - de socorros mutuos italiana: Unione e Benevolenza; tres años más tarde - por diferencias políticas - un grupo de asociados a ella se separó constituyendo La Nazionale Italiana (monárquica).
En la década de 1870, tomando como basamento el precedente de las dos anteriores, aparecieron otras sociedades (5)
Entre ellas, el 6 de Marzo de 1878, abrió sus puertas la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos Cristoforo Colombo de Quilmes.
Respecto de esta, resultó difícil la búsqueda de fuentes en 1a. actual sede social, donde no fue posible hallar libros de actas (sólo dos de ellas), como tampoco libro de socios. La citada carencia, no permitió -por lo menos en esta primera etapa de la investigación continuar la valiosa línea de trabajo iniciada por Samuel Baily, examinando cuatro casos de sociedades italianas de Buenos Aires. (6)
Sí – afortunadamente - hemos encontrado datos no empleados anteriormente que constituyen un material sumamente útil: las publicaciones de "El Quilmero". Periódico bisemanal de intereses rurales (1875-1889) Aunque incompleto - sólo existen los ejemplares correspondientes al período 1878-1889, suministró apreciable información relativa al proceso fundacional de la Sociedad Cristoforo Colombo, organización, miembros y principios ideológicos.
El presente trabajo monográfico, tiene como objetivo primordial, analizar la identificación de dicha, sociedad, con el ideario "Mazziniano". Determinar sus orígenes, integrantes, organización, actividades y rol desempeñado en la integración de los italianos a la comunidad local a. través de su apertura, serán los pasos esenciales a seguir en el tratamiento del problema propuesto.
Por último en cuanto al aspecto metodológico resultó muy provechoso - para clasificar el proceso de tratamiento y análisis - de un grupo social la obra de Manuel Tuñón de Lara, Metodología de la Historia Social de España, que contiene acertadas indicaciones sobre cuestiones a plantearse, tales como conocimiento de la vida cotidiana (fiestas, espectáculos); escala de valores, estructura interna; base social, entorno y normas de funcionamiento: estatutos, reglamentos, etc. (7) Las mismas fueron tenidas en cuenta.
II) BREVE PANORAMA DE LA INMIGRACIÓN ITALIANA EN QUILMES
La inmigración italiana a nuestro país, comenzó a ser significativa hacia la década de 1840, continuando por poco más de un siglo, con las lógicas interrupciones provocadas durante las dos Guerras Mundiales.
¿Qué motivó a los italianos para elegir destino en estas tierras?
Dejando de lado las razones económicas igualmente importantes -por cierto- Argentina era una tierra abierta al Republicanismo que reconocía y respetaba a los líderes del Risorgimento (1848-1849).
De acuerdo con esto, los inmigrantes liberales y republicanos prefirieron a nuestro país que - a pesar de un menor grado de desarrollo económico - les permitiría un mayor espacio de acción política. (8)
En lo relativo al aspecto cuantitativo, el principal período de inmigración italiana a la Argentina, fue el comprendido entre 1876 y 1925. (Documento n° 1)
De los datos estadísticos transcriptos en el apéndice documental, pueden deducirse dos conclusiones. En primer lugar, las dos corrientes principales la del Norte y la del Sur no alcanzaron su auge en forma simultánea; por el otro, los italianos del norte predominaron en el total antes de 1900; luego de esta fecha la primacía numérica la tendrán los sureños (10)
Igual que el resto del país, Quilmes recibió el aporte inmigratorio de italianos, en esas dos etapas definidas precedentemente.
Los Censos Nacionales de 1869, 1895 y 1914, son indicadores del crecimiento de la comunidad itálica en el Partido, mostrando la primacía de esta nacionalidad, con respecto a otros europeos dentro del mismo. (11 - Documento n° 2)
Con respecto al ámbito cualitativo es necesario hacer referencia a los orígenes socio-económicos de los italianos arribados al país, incluyendo obviamente a Quilmes.
El primer grupo (llegado entre 1876 y 1900) estaba compuesto en su mayoría por contingentes del Norte. Hizo su aparición juntamente con la llegada del ferrocarril, al Partido que nos ocupa.
Se constituyó de mano de obra especializada y cierto nivel de instrucción, lo que le permitirá transformarse en propietarios de bienes raíces. (12) Su distribución geográfica se localizó dentro del radio urbano.
Varios italianos lograron convertirse en propietarios: Cichero Domenico; Faccinetti, Carlo; Grassi, Antonio; Galli, Giovanni; Lanata, Francesco; Lavaggi, Agostino; Lavaggi, Gerolamo; Molinari, Gio-Battista; Mazza, Giovanni; Mazza, Carlo; Malnati, Luigi; Sasi, Giuseppe; Traverso, Giovanni; Musisano, Bartolomeo; Bazzigalupi, Girolamo; Giussani, Giovanni; Setti, Pietro; Badaracco, Giuseppe; Oliveri, Giuseppe. (13) Todos los nombrados, pertenecieron al grupo de socios fundadores de la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos Quilmeño.
La prosperidad económica de este primer grupo arribado al país se logró estrechamente emparentada con las actividades desarrolladas en las áreas comercial e industrial.
Hacia 1891, varios eran los italianos poseedores de este tipo de establecimientos, que iban desde fondas y restaurantes hasta destilerías y fábricas de gaseosas y cerveza. (14)
El segundo grupo, llegado a partir de 1900 era originario del sur de Italia. Predominaba en él la mano de obra no especializada, casi analfabeta, con la sola experiencia en las tareas agrícolas. Así como los primeros inmigrantes se radicaron, con preferencia, en la zona urbana quilmeña, estos se asentaron en las chacras localizadas al oeste de las vías férreas (15)
Además de las actividades económicas, sería importante plantearse, si los italianos participaron en alguna institución, sobre todo de carácter cultural, a nivel individual o grupal.
En lo relativo al periodismo, si bien frondosa es la nómina de impresos que aparecieron y circularon en Buenos Aires (16), no ocurrió lo mismo en Quilmes. La colectividad itálica local, no editó ninguna publicación periodística, ni en su propia lengua ni en la nuestra. (17)
Tampoco participó - al menos - dentro de la Sociedad Cosmopolita de Socorros Mutuos, abierta a todos los individuos, sin distinción de nacionalidad, creada en 1881, ya que entre sus integrantes no aparecen apellidos italianos.(18)
Parecería entonces que - siempre de acuerdo a la información obtenida - que la mayor actividad fue desplegada a través de la Sociedad Cristoforo Colombo.
A tratar esta cuestión, responden las siguientes páginas.
III) SOCIEDAD ITALIANA DE SOCORROS MUTUOS CRISTOFORO COLOMBO DE QUILMES
a. PROCESO FUNDACIONAL
Los inmigrantes participaron en una serie de organizaciones, tanto de origen local como extranjero. Estas asociaciones voluntarias llegaron a agrupar una cantidad muy elevada de individuos. Estas entidades perseguían objetivos de asistencia, protección, recreación y reeducación. Sobre todo poseían hospitales y escuelas. Estos servicios, al comienzo, suplían a los que el país no estaba en condiciones de proporcionar. (19)
En pos de estos fines, fueron fundadas varias Sociedades de Socorros Mutuos. Hacia 1899, Francesco Scardin, viajero italiano, mencionaba, entre otras a Unione e Benevolenza, Unione Operai Italiani, Nazionale Italiana, Colonia Italiana, Italia Unita, Margherita di Savoia, Giuseppe Garibaldi, XX Settembre, Eppur si Muove, entre otras.(20)
Con respecto a la asociación que nos ocupa, un grupo de italianos lanzaron la idea de formar una. Sociedad de Socorros Mutuos. Publicaron con este propósito un aviso en el periodico local "El Quiimero", el 11 de abril de 1878, invitando a los interesados a concurrir a las dos de la tarde en punto, a una reunión a celebrarse en el Hotel de La Sirena, frente a la estación ferroviaria. (21)
Este aviso publicado consecutivamente durante tres días mereció elogiosos conceptos de parte de la redacción de “El Quilmero”. La misma expresaba que sin la asociación no había progreso posible, porque la fuerza sólo se encontraba en la unión. (22)
En la fecha proyectada se efectuó la primera reunión, durante el transcurso de la cual, se inscribieron 38 italianos como socios. Se propuso que los presentes determinaran la cuota de ingreso, quedando esta fijada en 20 pesos m/c,; se resolvió que el Sr. Mazza registrara, provisoriamente, a los italianos que fueran ingresando. Finalmente, se decidió también que la reunión para nombrar la Comisión Directiva, tuviese lugar el domingo 5 de Mayo de 1878 en la casa del Sr. Mazza, sita en la calle 15, esquina 14 de la localidad de Quilmes (Esquina SO de Alvear y Alem). (23)
Nuevamente los conceptos fueron laudatorios en “El Quilmero” referidos a la formación de la Sociedad, la primera de su tipo en el Partido: "Al dirigiros italianos estas palabras, es con el objeto de felicitaros por el gran paso de progreso que habéis dado, y porque perseveréis en ese camino que es el único que conduce a la felicidad social". (24)
En dicha reunión, se declaró abierta la sesión, con un considerable número de italianos. El primero en hablar, el Sr. Francisco Taiana, expresando la necesidad de designar un presidente que dirigiera la asamblea, proponiendo para tal cargo al Sr. Domingo Cichero, allí presente. La propuesta, calurosamente apoyada, fue aprobada. Taiana, seguidamente, sugirió la elección de un secretario provisorio, redactor de las Actas, proponiendo al Sr. Sormani, quien se excusó por no poder aceptar. Entonces, la mayoría de los presentes votó por el propio Taiana.
El presidente electo, Domingo Cichero, tomó la palabra, pronunciando un discurso: “… inspirato di sentimenti umanitari e patriottici, spiega lo scopo che si si deve prefieggere la società basata sul mutuo soccorso...” (25)
El presidente continuo su alocución haciendo conocer las normas principales a seguir por la Sociedad: “...raccomanda la concordia e la unione fra tutti e connasionali di Quilmes, basi questi indispensabili al buon principio e al buon andamento della società". (26)
Durante el transcurso de esta sesión, a la cual concurrieron solamente italianos, se trató la designación de una Comisión Directiva. A este efecto, fueron presentadas dos listas; una de ellas, la primera confeccionada durante una reunión previa el domingo anterior; la otra elaborada en el mismo día.
El presidente explicó el procedimiento de votación lo que indica claramente la ausencia de sufragio secreto, los que se pronunciaban por la primera lista debían dar un paso atrás, los que lo hacían por la segunda debían permanecer en el recinto, cerca del escritorio del presidente. Por haberse retirado casi todos los presentes, resultó triunfadora la primera lista. Resultaron elegidas - en consecuencia - las siguientes personas para integrar el primer Consejo Directivos
Vicepresidente: Olivieri, Fileni
Tesorero: Mazza, Giovanni; Vice Tesoreros: Badaracco, Giuseppe; Secretario: Pellegrino, Baldasarre; Vice Secretario: Doctor Balestra
Consejeros: Cabrera, Michele; Baccigaluppi, Emmanuele; Baccigaluppi, Girolamo; Lavaggi, Agostino; Chirizzola, Nicola (o Chichizzola); Rosselli, Giacomo; Lanata, Francesco; Mazza, Carlo; Lavaggi, Gerolamo; Taiana, Francesco; Rossati, Pasquale; Musisano, Bartolomeo. (27)
El presidente expresó que durante del resto del mes de mayo, no habría sesiones, con el objeto de dar tiempo a la Comisión Redactora del Estatuto, e elaborarlo. La próxima reunión sería comunicada a través de un aviso en los periódicos. (29)
Esto efectivamente se concretó, ya que desde las páginas de “El Quilmero”, se canalizaron las redes de información, relativas a Convocatorias de Asambleas y otras actividades, como veremos más adelante.
A continuación se debatió, prosiguiendo con la sesión, si los italianos que ya habían abonado los 20 pesos m/c, debían sufragar ahora los 50 correspondientes a la cuota de ingreso. Realizada la votación, la mayoría se pronunció por la primera cifra. Pero, muchos de los que habían pagado el importe más bajo, se encontraban presentes en el recinto, expresando poder pagar el monto restante, 50 pesos m/c. Con el objeto de conciliar las opiniones diversas, el presidente, Sr. Cichero, propuso que aquellos que no pudiesen abonar los 50 pesos al contado, podrían hacerlo en dos cuotas, moción que fue aprobada. El Sr. Oliveri, expresó que podía hacerse cargo de las cuotas de ingreso de cuatro o cinco personas, que no pudiesen pagar (30) Estas palabras, fueron aceptadas, con gran ovación. Se resolvió, a propuesta de Cichero, que no habría, momentáneamente, subsidios para los socios a los efectos de contar con un fondo comunitario. (31) Finalmente, el presidente declaró cerrada la sesión, volviendo a recomendar la unión y la concordia entre todos. Invitó a no retirarse a los miembros de la Comisión Directiva, a fin de tratratar algunas cuestiones relativas al buen funcionamiento de la Sociedad. (32)
De esta manera, el 6 de mayo de 1878, quedo formalmente constituida la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos Cristoforo Colombo.
III. b. ASPECTOS REGLAMENTARIOS DE LA SOCIEDAD RELACIONES FUNCIONALES ENTRE SUS MIEMBROS ORÍGENES SOCIO-ECONÓMICOS DE ALGUNOS DE ELLOS.
Como ya había quedado resuelto durante mayo de 1878, no hubo reuniones, a fin de facilitar las tareas de la Comisión Redactora del Estatuto. El 30 de dicho mes, apareció en “El Quilmero”, un aviso convocando a los italianos de Quilmes y la campaña a intervenir en la Asamblea General del 2 de Junio, en el salón del Sr. Mazza, con el objeto de sancionar el Estatuto Fundamental (33).
Aparentemente - ya que no encontramos información ni mediante las verbales ni las publicaciones del periódico citado precedentemente - parecería que la reunión proyectada para el 2 de junio, no se concretó por falta de quorum.
Lo mismo ocurrió el 30 del mismo mes, a pesar de haberse convocado la asamblea desde las páginas del diario en cuestión, durante seis días consecutivos (34).
El 4 de Julio nuevamente se avisó, pero esta vez aclarando que las decisiones tomadas en la próxima reunión, el día 7, serían consideradas válidas, cualquiera fuese el número de asistentes. (35)
En fecha cercana, “El Quilmero”, refiriéndose a la Sociedad Cristoforo Colombo, expresaba que la unión hacía la fuerza y de esta conjugación salía luego la libertad. A criterio de la publicación, la fraternidad y la caridad, eran la base de la Sociedad. (36) Finalmente, la reunión pudo concretarse en el domicilio del Sr. Giovanni Mazza. En el orden del día aparecieron cuatro cuestiones a tratarse: aprobación del reglamento de la sociedad; designación del secretario; reemplazo de los consejeros renunciantes y local social (37)
Encontrándose ausentes el presidente, Sr. Cichero y el Secretario Sr. Pellegrino, fueron designados para cubrir esa función momentáneamente los señores Taiana y Traversi, respectivamente. Fueron nombrados los socios presentes, para poder registrarlos en el acta de la reunión (38). El presidente insistió sobre la necesidad de aprobar el Reglamento o Estatuto con el fin de establecer la base fundamental de la Sociedad y los vínculos de hermandad y caridad sobre los cuales se funda la mutua protección. (39) Seguidamente se pasó a la lectura del Estatuto, compuesto de cinco capítulos. En el primero se determinaban la naturaleza y el objetivo de la Sociedad. Lamentablemente no explicados en el texto. También se nombraban las provincias italianas, entre ellas Triestino, Savoia, y Corsica. (Art. 8o) El segundo capítulo hacía referencia a la administración de la Sociedad, a través de dos Secretarios, uno Adjunto, y el otro Honorario, y un Vicesecretario (Art. 12) que percibirían un sueldo determinado por el Consejo de Administración (Art. 20) A propuesta, de varios socios, fue nominado y aprobado por unanimidad, para el cargo de Secretario Honorario, el Sr. Cario Faccinetti. El presidente interino, Sr. Francesco Taiana, que cumplía funciones de Secretario expresó no poder seguir desempeñando las mismas, debido a que por vivir en Buenos Aires, la distancia se convertía en un obstáculo. (40) Luego de agradecerle los servicios prestados, le fue aceptada la renuncia. Seguidamente, se procedió a la elección del Secretario adjunto, resultando designado el Sr. Enrico Traversi, el que aceptó el cargo, agradeciéndolo y expresando el deseo de cumplir su función con celo y dedicación.
En el capítulo III, se incluyó el voto secreto, para las deliberaciones de las cuestiones administrativas. Recuérdese que durante la primera reunión de la Sociedad, el 6 de Mayo de 1878, no existía, este tipo de sufragio.
Con respecto al Capítulo IV, la única aclaración contenida, en el Verbale (locuciones), es la referencia a las Elecciones de la Sociedad, no explicitando más detalles en cuanto al procedimiento a seguir. Fue aprobado por unanimidad. (41)
Tampoco en el Capítulo V aparece el contenido de los artículos que lo componen, haciéndose mención, únicamente, de los derechos y deberes de los socios y en el artículo 44 se califican de socios fundadores, a aquellos que ingresen a la Sociedad hasta el 30 de setiembre de 1878. Esta fecha había sido prolongada ya que para tal denominación era el límite cronológico el 31 de mayo; según lo establecido en la primera reunión. (Documento N° 3) Terminada la aprobación del Reglamento, se planteó la cuestión relativa a la sede de la Sociedad. Al respecto dos socios Giovanni Mazza y Nicola Chirizzola, ofrecieron sus salas; este último ofertó el local conocido con el nombre de Cervecería Vieja por todo el año y en forma gratuita. Fue aclamado y aprobado este último ofrecimiento y declarado Chirizzola socio benemérito. (42) Seguidamente, se efectuó la elección de los Consejeros, que debían reemplazar a los renunciantes, resultando electos Giovanni Traverso, Girolamo Bazigalupi (o Baccigaluppi), Antonio Bonfiglio, Giacomo Rosselli, Gio Battista Bertoli. (43) Finalmente, se dio por finalizada la sesión.
Este Estatuto, discutido y aprobado el 7 de julio de 1878 fue modificado en reunión del 13 de abril de 1879. En esa oportunidad, se determinó que podrían ser admitidas, como socios protectores, los individuos de cualquier nacionalidad, que pagasen una cuota no menor de la que abonan los socios efectivos o hagan donación de 5000 pesos m/c (alta cifra) durante un año en moneda corriente o en servicios equivalentes. (44) De esta manera, en correspondencia con esta reforma, fueron propuestos como socios, algunos vecinos no italianos.
Es necesario en relación con esto último, hacer una referencia a Juan Davidson, inglés propietario de grandes extensiones en Quilmes, entre ellas el establecimiento “El Mirador", actual localidad de Hudson. (45)
El individuo en cuestión, donó a la Sociedad Italiana Cristoforo Colombo, un terreno frente a la estación, sobre el cual se edificaría la futura Sede Social, inaugurada en 1907. (46)
Si bien la cuestión económica no puede soslayarse, esta excede los límites de este trabajo y en correspondencia con el enfoque ideológico elegido para el tratamiento del tema propuesto, consideramos prudente hacer una serie de reflexiones sobre el motivo que habrá llevado a los miembros de la Sociedad, a modificar el Estatuto, permitiendo el ingreso de socios no italianos en carácter de benefactores. Parecería que la afirmación de Baily, relativa a la aparición, desde la década de 1870, de tendencias regionalistas y ‘campanilistas’ (excesivo apego a la propia ciudad o pueblo, sus usos y tradiciones) no tiene correspondencia aquí. (47)
Por el contrario, las ideas liberales de la Sociedad - que serán tratadas más adelante - se inclinarían hacia cierta forma de cosmopolitismo, al permitir la entrada de no italianos. En cuanto a los orígenes sociales de los miembros de la Sociedad, hemos encontrado información sobre algunos de ellos, sobre todo de los que ocuparon la presidencia (Documento N° 4)
Doménico Cichero, nacido en Liguria, fue constructor naval, debiéndosele las primeras tentativas de ese tipo de actividad económica en la Argentina. En efecto, a comienzos de las primeras décadas del siglo pasado, abrió en la Boca del Riachuelo, un astillero. Radicado en Quilmes, se dedicó a la vitivinicultura. (48)
Francesco Taiana, industrial nacido en Como, juntamente con su cuñado Francisco Giussani (ambos empleados de la casa Fusoni y Maveroff de Buenos Aires) fundó una destilería, con fábrica anexa, de licores. Además de presidente de la Sociedad Italiana de Quilmes, lo fue de ‘Unione e Benevolenza’. (49)
Luigi Pesenti era propietario de una importante quinta de la zona residencial quilmeña, de aproximadamente una manzana. (50)
Natale Pini, con otros socios, poseía una fábrica de gaseosas y cerveza, llamada “El Pino”. (51)
Giovanni Cini se dedicaba al comercio. (52)
Luigi Zanotti, presidente entre 1894 y 1904 y nuevamente en 1906, nacido en Italia en 1860, se radicó en Quilmes en 1885, dedicándose a la ganadería, actividad que le permitió amasar fortuna. Fue elegido presidente de la Sociedad Cristoforo Colombo; cuando asumió el cargo, la institución contaba solo con 200 socios y en el transcurso de su gestión llegó a poseer 800. (53)
Carlos Faccinetti se dedicó a las labores industriales.
Felice Fornabaio, por último, presidente en varias ocasiones (1908 a 1916); italiano, había nacido en la provincia, sureña, de Matera, llegó al país en 1883, estableciéndose en Quilmes en 1894. Aquí fundó una casa de cambio y agencia de vapor, con representación del Banco Francés e Italiano. (54)
De las actividades económicas desarrolladas por ocho presidentes, de un total de catorce, en el período 1878-1916, puede inferirse que todos ellos - obviamente la referencia a aquellos de los cuales hemos obtenido información - gozaban de una satisfactoria posición socio-económica.
Veamos ahora, que ocurría con los socios fundadores, integrantes de la sociedad no directivos. Aparecen, un industrial Giovanni Guissani, propietario de una destilería de alcohol (55); tres comerciantes: Agostino y Girolamo Lavaggi. El primero propietario del almacén “Del Globo”, especializado en comestibles y artículos correspondientes a ese ramo. (56) También en el área comercial, Bartolomeo Musisano. Entre los carpinteros aparece Antonio Grassi; molineros como Gío Battista Molinari, quinteros como Giuseppe Badaracco, quien poseía en su propiedad uno de los primeros molinos bombeadores de agua de Quilmes; un agrónomo Enrico Traversi, labradores como Giovanni Mazza, Carlos Mazza, Girolamo Baigalup (o Bazigalupi o Baccigaluppi), y Giovanni Traverso; albañiles como Luigi Malnati; faroleros como Pietro Setti. (57) Otros socios se dedicaban a tareas que hoy podríamos calificar como correspondientes al área de transportes y los servicios municipales. En el primer caso, los hermanos Fiorito, Angelo y Giuseppe, escrituraron el 8 de febrero de 1909 una Concesión por veinte años para explotar el servicio de tranvías, efectuando la electrificación del mismo cinco años después. En el segundo caso Pascuali Fossati, en 1877 era concesionario del alumbrado público. (58) Si bien no hemos podido obtener información sobre las actividades económicas de Giuseppe Oliveri, puede inferirse que su situación era óptima, ya que - como se ha visto - se había ofrecido durante el transcurso de la primera, reunión de la Sociedad a pagar la cuota de ingreso a. cuatro o cinco personas que no pudiesen hacerlo por sus propios medios. (59) Por otra parte, existía un solo profesional el Dr. Tomás Balestra (que se instaló en Quilmes como médico, durante más de un año).
De la información expuesta, puede deducirse que dentro de la Sociedad, si bien prevalecían los industriales y comerciantes, también tenían cabida, aunque las cuotas de ingreso y las mensuales les implicasen un esfuerzo de importancia, los otros sectores socio económicos, como el caso de labradores y albañiles.
Esta apertura de la Sociedad Italiana, sin distinguir orígenes sociales, puede afirmarse que está muy ligada a los principios de fraternidad y libertad del ideario mazziniano.
Giuseppe Mazzini (1805-1872), fue un nacionalista y liberal genovés. Exiliado en Marsella, fundó la Joven Italia, sociedad secreta que bajo el lema "Italia prá da se", persiguió la unidad independencia y renovación nacionales, a través de insurrecciones populares. (60) En el juramento de la Joven Italia, declaraba que el pueblo era el depositario de la fuerza con la que Dios había, creado las naciones. Expresaba también el compromiso:
"Di consacrarmi tutto e per sempre a costituire con essi l'Italia in Nazione Una, Indipendente, Libera, Repubblicana [...] Di socorrere coll'opera e coll consiglio a miei fratelli nell' associazione". (61)
Dicha Sociedad, se proclamaba republicana y unitaria:
"Repubblicana: perché teoricamente tutti gli uomini di una Nazione sono chiamati, per la legge di Dio e dell'umanità, ad essere liberi, eguali e fratelli, e l' istituzione repubblicana e la sola che assicuri questo avvenire..." (62)
Unitaria :
"... perche senza Unita non v'e’ veramente Nazione perche' senza Unità non v'e’ forze", (63)
La Joven Italia poseía bandera, con los colores blanco, rojo y verde, y escrita en su paño las palabras Libertad, Igualdad, Humanidad, de un lado, Unidad e Independencia, del otro. (64) Con respecto a la asociación, Mazzini consideraba que el hombre tenía, la obligación de unirse con otros y progresar. Expresaba al respecto:
"La libertà vi dà focolta di scegliere fra el bene ed il male,cioè fra il dovere e l'egoismo. L’educazione deve insegnarci la scelta. L'associazione deve darvi le forze Colle quali potrete tradurle la scelta in atto... Dovete combattere per il diritto d1 Associazioner , sengà il quale la Libertà e l’ Educíazione riescono inutili. Il diritto d'Associazione e’ sacro come la religione ...” (65)
Consideraba,además, que la Asociación debía tener determinadas características:
“...deve essere pacifica, deve proporsi di persuadere, non di Costringere.”
“...deve essere publicare associazione segrete dove non e Patria ni Libertà, sono ilegali.”
“... deve rispettase in altui i diritti, che sgorgano dalle condizioni eseenziali dell'ungine natura”. (66)
Toda la actividad política de Mazzini, quien además de fundar la Joven Italia, participo en la Revolución de 1830, en el Risorgimento (1848-1849) y fundó la Alianza Republicana (1866), por citar sólo algunos aspectos de su vasta labor, que estuvo animada de una concepción ética-religiosa de la vida. Las fuerzas espirituales tenían para él gran importancia. Consideraba que la vida espiritual unía y no dividía, hermanaba a los individuos en una realidad superior. Existía en su concepción coincidencias entre el pensamiento y la voluntad de Dios con el pensamiento y la voluntad humanas. Por último, la vida era misión, en lo relativo a. la conquista de la libertad. La libertad del individuo era la libertad del pueblo. (67)
Expuestas las ideas de Mazzini, el próximo paso en el presente trabajo, consistirá en examinar de qué manera ellas mantuvieron su vigencia y se concretaron en la Sociedad de Socorros Mutuos. Veamos en primer lugar, que grado de valoración tenían de Mazzini los integrantes de la Sociedad en cuestión.
En diciembre de 1880, la institución había participado de la inauguración del monumento, sito en Buenos Aires en homenaje al héroe del ‘Risorgimento’. (68)
José Garibaldi también era motivo de homenaje. En una solicitada aparecida en “El Quilmero” en junio de 1882, la Comisión Directiva invitaba, a todos los socios, a todos los italianos y a todos (repárese en esta frase) los que simpatizaban con la idea noble y patriótica de celebrar honras fúnebres al que en vida fue propulsor de las más amplias Libertades Públicas, el General Garibaldi (69)
Días después, convocaba a concurrir, en Capital Federal, a dicha manifestación de duelo, a todos los hombres de ideas liberales. (70)
La misma Municipalidad de Quilmes había enviado una delegación adhiriéndose de esta manera, a la manifestación cívico-fúnebre. (71) Actualmente, una calle de Quilmes, lleva el nombre de Garibadi.
Ya nos hemos referido a la Bandera de la Joven Italia; la Sociedad que nos ocupa, también la poseía, siendo no por casualidad, tricolor. A juicio de la Redacción de “El Quilmero”, dicha enseña, representaba la apoteosis de la libertad, proclamadora del triunfo del racionalismo, contra, el misterio del fanatismo clerical. (72) Para su confección, se reunió una cantidad determinada de dinero, abonada a las Directoras de escuelas, quienes la habían confeccionado. Muy importante es efectuar una descripción de la fiesta de presentación de dicha Bandera. (73)
A las 12 tuvo lugar un banquete en el Hotel La Sirena, asistiendo 45 personas, entre socios e invitados. Entre los oradores pueden citarse al Juez quilmeño, al presidente de Unione e Benevolenza y a los directores del "Operario Italiano" y de "La Patria", señores Rocca y Cittadini, respectivamente. Ambos hablaron de la importancia moral de la Institución, de los vínculos de fraternidad entrelazados con las demás sociedades de la República y de los lazos de amistad y simpatía, entre Argentina e Italia, que combatieron por el santo principio de libertad. Luego de este festejo formal, por la tarde la banda de música filarmónica, acompañó la marcha que portaba la Bandera por las calles de Quilmes, recibiendo muestras de adhesión. La enseña era acompañada por otras, en la siguiente disposición: a la derecha la Argentina, a la izquierda la suiza, detrás la española y la francesa. Para cerrar el acto, uno de los oradores fue el vicepresidente Taiana, quien pronunció palabras inflamadas de principios de la escuela de la libertad y de la emancipación de conciencia. (74) Evidentemente, la libertad era un elemento valiosísimo para la Sociedad Quilmeña. Durante el transcurso de la fiesta celebrada en Conmemoración del aniversario del Estatuto de Italia, el presidente de la asociación Cristoforo Colombo, Sr. Pesenti, tomó la palabra elogiando a dicho estatuto, base fundamental de la libertad del pueblo italiano que señaló, para, siempre, los deberes de un rey liberal, para con sus súbditos. Continuó diciendo:
“Libertad eres el don más precioso, eres algo tan necesario a un pueblo como necesario es el aire - a los pulmones...sin tí es imposible encaminar - una nación en la senda del progreso". (75)
La unión inseparable de libertad y progreso del ideario mazziniano, estaba presente en la Sociedad. También los principios de unión, patriotismo, fraternidad y caridad, aparecieron en las Verbali de la Sociedad, sobre todo durante el proceso fundacional. No olvidemos que el objetivo prioritario que se propuso la asociación fue el de los socorros mutuos, muy vinculados a la fraternidad y a la caridad. (76) Por otra parte, la institución cumplía con los atributos que - según Mazzini - debía tener la Asociación. A saber: era pacífica, ya que se fundamentaba en sentimientos patrióticos y humanitarios; en la concordia y en la unión entre todos sus integrantes. Era pública, sesionando en lugares conocidos; convocando sus reuniones y avisando sobre sus actividades a través de medios de difusión (“El Quilmero”) e invitando a participar en sus programaciones de bailes, homenajes y conciertos a toda la Comunidad.
Es importante hacer una referencia a. la participación de la Sociedad Cristoforo Colombo, en las fiestas conmemorativas de la entrada de las tropas italianas en Roma (20 de septiembre de 1870).
Los italianos residentes en nuestro país, consideraron dicha fiesta, como la más sentida y popular. Era llamada. Fiesta de Italia o Fiesta de Garibaldi, no obstante no haber estado este último en Porta Pía.
El 20 de Septiembre, coincidente con el comienzo de la primavera, era la ocasión de cantar, bailar y reír. (77) Este festejo presentó características particulares con respecto a los realizados en Italia. En la Argentina fue una celebración pública y popular, de contenido ideológico que se prolongó durante un tiempo mayor que en la península; en donde la Conmemoración fue suprimida con la firma del Tratado de Letrán en febrero de 1929. (78) ¿Cuál fue la actitud adoptada por la Sociedad Cristoforo Colombo respecto de esta fiesta?
El 30 de Septiembre de 1883, la Sociedad organizó un festejo, conmemorativo del aniversario de la entrada de las tropas italianas en Roma, invitando a toda la población a asistir. El programa consistía en: aviso con bombas el sábado por la noche; disparo de una salva al alba del día, discursos alusivos, bazar, baile a las 21.00 hs.
En 1885, la Sociedad anunciaba un partido de pelota, en la plaza Euskera de Quilmes (uno de los tantos nombres que se le dio a la plaza "Pintos", luego de "Marcelo", del "Mercado Municipal", hoy usurpada para un supermercado y complejo de cines: Lavalle Humberto Primo, Moreno y Olavarría) en conmemoración del aniversario de la entrada de las tropas italianas en Roma. (80)
Dos años después, el Consejo Directivo invitaba a los socios como también a todos los italianos, a una reunión el día 20 de Septiembre. Se celebró una fiesta en el local societario, que culminó con un animado baile prolongado hasta las cuatro de la mañana. (81)
En 1888 la Sociedad organizó un banquete programado para el jueves 20 de septiembre, por suscripción entre los socios y el domingo 23 habría, fiestas populares. (82) El salón sería iluminado y ejecutaría - durante el baile - la banda de música. “El Quilmero” calificaba como gloriosa a esta fiesta del 20 de Septiembre, dedicándole varias líneas, cuando se aproximaba la fecha, expresando inquietudes por saber de qué manera la Sociedad Italiana, se preparaba para la celebración. (83)
Por lo expuesto, puede concluirse afirmando que la fecha del 20 de Septiembre, era sentida y celebrada, por los miembros de la Sociedad, quienes compartían su algarabía, invitando también a los que no lo eran y en una actitud mucho más abierta, proponían la presencia de los otros sectores no connacionales. Sería necesario preguntarse acerca de si los miembros de la institución estudiada, tuvieron participación política, al menos en el ámbito municipal.
En primer lugar, es pertinente aclarar que ya desde las últimas décadas del siglo pasado, los extranjeros tenían, merced a la ley orgánica de las Municipalidades, la facultad de votar en las elecciones comunales. Para ello debían inscribirse, voluntariamente en un padrón especial bajo ciertos requisitos: ser mayor de 22 años; saber leer y escribir; estar domiciliados en el Distrito, desde un año antes del empadronamiento; tener propiedad en el Municipio o, en su defecto, pagar una patente industrial al menos de 50 pesos m/n (Documento n ° 5)
En Abril de 1886, en el Padrón publicado desde las páginas de “El Quilmero”, aparecían varios italianos, de diferentes profesiones, comerciantes, pintores, albañiles, labradores, zapateros y horneros, todos ellos propietarios. De ellos, cuatro pertenecían a la Sociedad Cristoforo Colombo: Enrico Traversi, Antonio Grassi y Giovanni Volpini (socios fundadores) y Giovanni Cini, presidente en 1888. (84)
Dos meses después, el 10 de junio efectuada la elección de municipales, resultaron electos cuatro italianos: Luis Pesenti con 72 votos, Fortunato Cichero con 67 votos, Rómulo Campodónico con 29 votos y Celestino Risso con 6 votos. (85) Pesenti, con mayor cantidad de sufragios, había sido presidente de la Sociedad, en 1882. Lamentablemente, al no contar con el Libro de Socios no hemos podido continuar -hasta el momento - investigando si los inscriptos italianos en el padrón de extranjeros, pertenecía a la Asociación en cuestión.
En una primera aproximación al tema de la participación política, entendida como actividad o enseñanza democrática, podría decirse que algunos socios mostraron interés en intervenir en las cuestiones municipales, tan ligadas a la vida cotidiana.
En cuanto al programa social, puede afirmarse que fue bastante amplio. Llevó a cabo numerosos bailes, en los cuales la banda de música de la Sociedad, ejecutaba sus partituras. A estos bailes, que muchas veces eran parte integrante de determinadas fiestas concurrían no solamente los italianos socios, sino que también eran invitados especialmente los que no lo eran, sin distinción de nacionalidad. Los programas tipo de las fiestas, contaban con disparo de bombas y juegos artificiales, concierto musical y baile social. (92) Las motivaciones de estos festejos eran varios: conmemoración del 20 de Septiembre - a la cual ya nos hemos referido -, recaudación de fondos y recordación del aniversario del Estatuto Italiano. También participaba en los homenajes a las fechas patrias argentinas. (93) En otro orden, algunos socios habían aportado dinero para los festejos del carnaval, en 1887 y 1888. Aparecen en una lista, incluyéndose el importe sufragado, Domenico Cichero, Carlo Faccinetti, Francesco Lanata, Luigi Pesenti y Agostino Lavaggi. (94)
La Sociedad Cristoforo Colombo desarrolló una intensa labor en el campo musical. Al respecto, contaba desde 1881 aproximadamente, con una Banda de Música, formada por una veintena de vecinos, artesanos e industriales, que tocaban como aficionados. Dos industriales, Faccinetti y Cini, eran, a la vez, músicos, y administradores. (95) Recibían aportes de la Municipalidad quilmeña, los que, aparentemente, no alcanzaban ya que solicitaron le fueran incrementados. La Banda actuó en varias ocasiones, en el Hotel Sirena, en el local de la Sociedad y también para que todos pudiesen oírla, en la plaza principal del pueblo. (97) Para finalizar con la actividad musical, señalemos que en la sede social, se instaló el teatro lírico "Cristoforo Colombo", inaugurado con las óperas ‘Manon’ y ‘La Traviata’, el 12 de Septiembre de 1909. (98) Esta preocupación artística, se mantuvo por muchos años.
A modo de síntesis, puede decirse que la sociedad desarrolló una importante actividad desde el plano mutual, educativo y cultural Las fuentes halladas y la proyección que tuvieron, llegando hasta nuestros días, permitirían afirmar que las dos últimas - fueron más firmes y sostenida.
De acuerdo al objetivo propuesto en el presente trabajo y a las fuentes y bibliografía examinadas, podemos arribar a las siguientes conclusiones. En cuanto al ideario mazziniano, puede afirmarse que era la base de sustentación de la sociedad de Socorros mutuos Cristoforo Colombo de Quilmes. Los principios de asociación, fraternidad, caridad, unión y republicanismo, se encontraban vigentes desde fecha, de fundación de la institución (6 de Mayo de 1878) y fueron mantenidos largo tiempo. Las muestras de patriotismo hacia los italianos, no olvidemos las adhesiones a los padres del ‘Risorgimiento’ y la recordación permanente del 20 de Septiembre, no se oponían a la participación en los homenajes efectuados durante las fechas patrias argentinas.
El concepto de la educación, ligada a la acción transformadora, se reflejó en la creación y mantenimiento - hasta el presente - de una escuela.
La Sociedad en cuestión fue unitaria y abierta, no un refugio o ghetto. Efectivamente, no había restricciones en cuanto a los orígenes regionales ni a los antecedentes socio-económicos de sus miembros. En determinados momentos, como hemos visto, permitió el ingreso, como socios protectores, de individuos no italianos; los cuales, de todos modos, debían ser presentados o auspiciados por socios italianos.
Por otra parte, la escuela establecida a partir de 1880, fue denominado, Hispano-Italiana y en varias oportunidades fueron invitados a los bailes y fiestas, individuos de otras nacionalidades.
También estuvo conectado con el periodismo local, sobre todo con “El Quilmero”, publicación desde cuyas columnas, siempre se apoyo y alentó a la institución.
Por último, algunos de sus miembros tuvieron participación política, resultando elegidos miembros de la Municipalidad de Quilmes evidenciando vocación democrática.
Finalizando, por lo expuesto precedentemente, puede afirmarse que la Sociedad Cristoforo Colombo de Quilmes, fue una manera de integración de los italianos a la sociedad receptora, y recíprocamente un modo de influir en esta.
Italia. Emigración a la Argentina total, por región y por zona, en el lapso 1876-1925
Baldassare Pellegrino
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