domingo, 10 de octubre de 2010

CASAS CON HISTORIA 6 - EL DORADO (COLABORACIÓN)

EL DORADO

Colaboración del señor Domingo Araujo
De “Eliaq Magazine” agosto/1995
En la segunda mitad del siglo XIX muchos porteños decidieron edificar sus casas de fin de semana o residencias veraniegas en el Sur de la Ciudad de Bs. As. Para 1870 era Presidente de la Nación Domingo F. Sarmiento y al ocupar la Vicepresidencia Adolfo Alsina quedó a cargo del gobierno de Bs. As. el Presidente del Senado Emilio Castro. El Partido de Quilmes tenía 6809 habitantes y 1506 el único pueblo (Quilmes) dentro del Partido. Fue precisamente en 1870 que sobre una gran extensión de tierra, allí donde hoy es Av. La Plata y Laprida se construyó una señorial residencia, que del pueblo era la hoy conocida como "El Dorado". La última calle del pueblo era la hoy Hipólito Yrigoyen, y la primera entre chacras, Vicente López. Solo con diligencias y carretas se accedía a ella, aunque la llegada del tren (1872) acercó las distancias desde Bs. As.
La propiedad paso por varias manos hasta que fue adquirida por la familia Dorado -de allí su nombre- acaudalados comerciantes de origen boliviano. Y en 1927 fue comprada por don Carlos Hillner, quien según el Ingeniero Ricardo González "era un hombre gentil, que supo conciliar la riqueza y la bondad, la fortuna y el respeto".
En tiempos de don Carlos, la propiedad tenía alrededor de 40 Hectáreas. El construyó, algo más al Sur, su chalet residencial (hoy la confitería El Bosque) y hacia el Oeste soberbias cuadras y caballerizas de inestimable valor edilicio. Don Carlos Hillner tuvo una pasión obsesiva por los carruajes y caballos. En cada box perduran los nombres de los animales que le pertenecieron entre ellos Jupi y Dandy, sus preferidos.


El Dorado en vida de su propietario poseía cuidadas construcciones, hermosos jardines e invernaderos, un bosque poblado de valiosas especies americanas y europeas, alguna de ellas únicas en el país, estatuas y ornamentación versallesca. En el año 1950, resolvió donar 90.000 m2 de su propiedad a la Provincia de los cuales, la mitad sería destinada a la Dirección de Escuelas, para instalar una colonia de vacaciones. Se reservó el usufructo del lugar hasta su muerte ocurrida el 21 de Junio de 1961. También donó la magnifica colección de carruajes que pueden ser vistos en el actual Museo que figura en los catálogos internacionales y que es visitado por muchos turistas extranjeros. 
Paradójicamente, muchos quilmeños no lo conocen. Los duendes, mis amigos, seguramente jugaban sobre el Spider, el Dog-car (que podía llevar debajo del asiento del conductor al perro de caza), el Tirbari, entre otros, y también el "ómnibus", coche que era utilizado para transportar hasta 10 pasajeros, 6 de los cuales viajaban en su interior. Eran los pasajeros de primera clase, las de segunda, viajaban sobre ei asiento ubicado en el techo.
Mucho hay que decir sobre El Dorado, sobre don Carlos, sobre el Museo de Carruajes, sobre las figuras importantes que visitaron su retiro. Volveré al lugar.

El Duende
Compilador, Chalo Agnelli

1 comentario:

Anónimo dijo...

Conoci El Dorado 1880 y siendo niña pude apreciar las bellezas en su interior y la cordialidad del señor Carlos Hillner y su sucesor quien mantuvo El Dorado hasta que tuvo que vender parte de sus tierras.