Fue reelecto en 1888, en 1889 y en 1890, hasta su renuncia el 7 de noviembre de este último año. Felipe J. Amoedo lo acompañó durante todos estos periódos como presidente del municipio y tras su renuncia lo sucedió provisoriamente hasta 1891, en que fue electo "unánimemente y por aclamación" don Fernando J. Otamendi.
IDENTIDAD - PERTENENCIA - TRADICIÓN - INSTRUMENTO DE DIVULGACIÓN HISTÓRICA DEL PARTIDO DE QUILMES Y SU ZONA DE INFLUENCIA, DESDE MÁS ALLÁ DE SUS ORÍGENES EN 1666 CON LA COMPULSIVA LLEGADA DEL PUEBLO QUE NOS DIO GENTILICIO Y TOPONIMIA, LAS TRES FUNDACIONES, FRAGMENTACION POLITICA, ORIGEN Y DESARROLLO DE SUS INSTITUCIONES, BIOGRAFÍAS, COMENTARIO DE LIBROS DE AUTORES LOCALES Y TODA LA BIBLIOGRAFÍA REFERENCIAL QUE SURJA Y SE DESCUBRA... "NO SE AMA LO QUE NO SE CONOCE". CHALO AGNELLI
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jueves, 26 de septiembre de 2013
NICOLÁS ELISEO VIDELA, PRIMER INTENDENTE ELECTO POR EL H.C.D.
Fue reelecto en 1888, en 1889 y en 1890, hasta su renuncia el 7 de noviembre de este último año. Felipe J. Amoedo lo acompañó durante todos estos periódos como presidente del municipio y tras su renuncia lo sucedió provisoriamente hasta 1891, en que fue electo "unánimemente y por aclamación" don Fernando J. Otamendi.
"QUILMES, MI HISTORIA OCULTA" NUEVO LIBRO DE JORGE COLOMBO
PRÓLOGO
PARA UNA HISTORIA SOCIAL DE FAMILIA
Chalo Agnelli
La historia
social es una rama de la ciencia histórica que toma como objeto y sujeto
a la sociedad en su totalidad a diferencia de la historia tradicional, de tipo
política y militar, que da relumbre a figuras individuales y a hechos de
contundencia nacionales o universales.
Algunos historiadores renieguen de la historia social
pues consideran que esquiva unas pulgadas la heurística y la hermenéutica, así
y todo, yo creo que no hay una historia política, tradicional, económica y otra
social, creo que en las últimas décadas del siglo XX esa disparidad fue
defenestrada por la premisa “todo es historia” que, sobre todos los
investigadores, impuso Félix Luna. Una perspectiva historiográfica novedosa
inspirada en la vida cotidiana, en simples hábitos consuetudinarios, elementos
socioculturales que se trasmiten de generación en generación y sobre estos
instrumentos se reconstruye la enrevesada urdimbre de un ayer proceloso o
apacible.
La Historia – así con mayúsculas – en su origen
primigenio, desde que Heródoto de Halicarnaso, se propuso averiguar los hechos
del pasado de acuerdo con testimonios imbatibles; es el tránsito por este mundo
de hombres y mujeres: sus vínculos y relaciones, trabajos, costumbres públicas
y privadas, prejuicios, pasiones, formas de vida, elecciones e imposiciones
ambientales, alimentación, indumentaria, todo lo que boceta, modela, traza y pinta
el perfil de las generaciones, pudiendo distinguirlas unas de otras en el incesante
suceder de cambios inherentes, que sufren esas propiedades a lo largo de años, décadas
y milenios.
En el siglo XIX - el siglo de la inmigración de masas
- millones de europeos desembarcan en los puertos argentinos y en el curso de
los años dejaron un aporte esencial en el espectro total de la vida nacional
para el desarrollo del país que adoptaron. Pero sobre todas, dos variables distintivas
caracterizan a esa inmigración: la primea fue la rápida hibridación que legó a
las generaciones subsiguiente y la segunda el diseño de un perfil de clase
media que marchó no siempre a la par de las dispensas económicas y que
caracteriza particularmente a la sociedad argentina a diferencias de otras
latinoamericanas.
Todos los párrafos que preceden este prólogo se
encuentran en este libro. Entramado que Jorge Colombo siguió para construir
esta genealogía - sin las rigurosidades que los doctos en esa ciencia decretan
– que es de un estudio de inmigración y su legado a las nuevas generaciones; la
influencia que su proceder tuvo contribuyendo al crecimiento de un pueblo, en
este caso, predominantemente Quilmes y su zona de influencia. Por lo tanto, más
que una obra genealógica este libro es una historia familiar; la descripción
sistemática y la investigación de los hechos pasados en relación a la familia Colombo
– March y sus lazos preexistentes y subsiguientes con otras familias.
Lo primero al iniciar una investigación familiar es
recopilar la mayor cantidad de antecedentes a través de dos fuentes
documentales y orales, estas últimas, dado que están nutridas de tradición familiar
resultan generalmente endebles, pero el Dr. Colombo - puedo dar fe de ello - no
se quedó con la anécdota, sino que desmanteló estrategias para darles sustancia
documental al libro.
Los que recorremos archivos, hemerotecas, bibliotecas,
y desandamos documentos resquebrajados, libros amarillentos e indagamos en la
memoria de la gente mayor para recuperar la vida pasada de un pueblo, sus
actividades, familiares, sociales, culturales, educativas, sus
entretenimientos, los que hacemos historia de las sociedades, al reseñar hechos
como los que nos ofrece Jorge Colombo, intuimos que, además, estamos generando
un documento que en un futuro cercano o muy lejano será de utilidad para nuevos
investigadores. Somos trabajadores de la memoria y recuperamos de la
distracción o del olvido a los que hicieron posible, mal o bien, el presente
con sus acciones y omisiones.
El Dr. Jorge Colombo, agrega a su polifacético accionar: médico, artista plástico, novelista, ensayista... la de amanuense de sus antepasados y lega este trabajo - quizá sin proponérselo - a sus descendientes para fortalecer en ellos la identidad y la pertenencia, dos cualidades que vigorizan la vida humana, sobre todo hoy, en este mundo globalizado donde la filiación y el acervo de la propia historia se desvanecen y se enredan con fatídica ligereza.
VER SOBRE JORGE COLOMBO MARCH
http://elquilmero.blogspot.com.ar/2013/07/retrospectiva-exposicion-de-j-colombo.html/