En pleno Mundial de Fútbol Rusia 2018, recordamos a algunas
de nuestros deportistas quilmeños, especialmente a destacados futbolistas: Vicente Zito, Juan Arrillaga, Emilio Quadrio, Ramos
Delgado, Juan Carlos Mandile, los Campolo, los Merediz, las Corsiforti, las Echelini… y especialmente a un quilmeño que
participó de la primera final de una copa mundial, Juan Bottaso.*
Retrato de Bottaso (aquí con dos 's' y una sola 't') por Jorge Luis Barton para la revista A.B.C. de Quilmes
“CORTINA METÁLICA”
Juan Bottaso nació en Quilmes el 23 de octubre de 1908 y murió en esta misma ciudad el 23 de diciembre de 1950. Fue una figura brillante del fútbol argentino. A pesar de su baja estatura (1,69 m.) estaba muy consolidado en el arco. El periodista Alfredo Rossi, quien firmaba sus artículos con el seudónimo de Chantecler, lo apodó “Cortina Metálica”. Su popularidad motivó a H. Zamora y M. Padula, quienes compusieran el tango “La cortina metálica” cuya letra dice:
Juan Bottaso nació en Quilmes el 23 de octubre de 1908 y murió en esta misma ciudad el 23 de diciembre de 1950. Fue una figura brillante del fútbol argentino. A pesar de su baja estatura (1,69 m.) estaba muy consolidado en el arco. El periodista Alfredo Rossi, quien firmaba sus artículos con el seudónimo de Chantecler, lo apodó “Cortina Metálica”. Su popularidad motivó a H. Zamora y M. Padula, quienes compusieran el tango “La cortina metálica” cuya letra dice:
“¡Arquero
lindo!, ni el viento pasa; toda la hinchada tiene en su puño. Vengan ‘balazos’
que es de buen cuño, Sólo los brujos lo vencerán (...) La tribuna entera te
saluda… ‘Botasito’, Porque sos el mago de la hinchada. Los domingos sos cortina
de negocio que al balazo desafió. Y tenés el alma dura frente al ojo del
cañón”. (textual)
COMIENZOS
Se inició en el fútbol en San Lorenzo de la Liga Quilmeña, donde la
hinchada, primero, lo apodó "tenacita" por la forma en que aprisionaba
la pelota. Pasó al Quilmes Atlético Club donde jugó en 1925 y 1926, año en que
tuvo una insuperable actuación frente a San Lorenzo y al finalizar el partido
– que terminó con el triunfo “Azulgrana” - los jugadores visitantes alzaron en
andas al rubio arquero quilmeño.
En 1927, pasó a Argentino de Quilmes, continuando con los éxitos.
En Los Mates se lució frente a Estudiantes de La Plata.
En 1928, integró el equipo de Provincia en los clásicos encuentros
frente a su similar de Capital Federal. También fue parte del seleccionado que en la vieja cancha de Sportivo Barracas
enfrentó a los escoceses y a los españoles.
En 1930, pasó al equipo de Gimnasia y Esgrima de La Plata en la gira
que realizaron por Europa: Portugal, España, Francia y Checoslovaquia, países
que conocieron el amplio hándicap del arquero.
Para esa
época ya había alcanzado gran popularidad, elogiado por los cronistas
deportivos y respetado por sus colegas, el goleador Francisco Varallo [1] lo
destacó al confesar “supo atajarme goles
cantados”.
FINAL DE LA COPA MUNDIAL DE FÚTBOL
DE 1930
En junio de 1930, Bottaso defendió el arco argentino en la final
del campeonato Mundial disputado en el “Estadio Centenario” de Montevideo; donde
debió reemplazar al entonces arquero titular, Ángel Bossio,[2] en la
semifinal contra Estados Unidos y luego en la final contra Uruguay, jugando
lesionado la mayor parte del encuentro. Fue la primera final de una Copa
Mundial, se enfrentaron los dos finalistas del torneo de fútbol olímpico de
Ámsterdam/1928, las selecciones de
Uruguay y Argentina. Los locales alcanzaron el primer título mundial al
derrotar a Argentina por 4 a 2.
En 1931, fue transferido al Racing Club
de Avellaneda donde se lució hasta fines de 1935, pasando en 1936 al Quilmes
Atlético Club.
1935. San Lorenzo 5 – Racing 2, en Boedo. En la foto el segundo gol de San Lorenzo: Luis
Rojas al arquero Juan Bottaso. Fotos del Club Atlético Atlanta (Buenos Aires,
Argentina), en su gran mayoría aportadas por Edgardo Imas y su archivo.
Transcurrió los últimos años de su brillante carrera deportiva
frente a River Plate, en un partido nocturno disputado en el viejo estadio de
la avenida Alvear y Tagle.
En 1933, siendo ídolo de la Academia, declaró: “… a mí no me fue bien en el profesionalismo. Paciencia. Yo fui correcto, confié en palabras y me engañaron. Sólo pido a los dirigentes que sean correctos”. Declaró que su mayor placer “… sería patear un penal. A lo mejor lo erro y me toman el pelo, pero si lo llego a acertar me saco un viejo gusto”.
En 1933, siendo ídolo de la Academia, declaró: “… a mí no me fue bien en el profesionalismo. Paciencia. Yo fui correcto, confié en palabras y me engañaron. Sólo pido a los dirigentes que sean correctos”. Declaró que su mayor placer “… sería patear un penal. A lo mejor lo erro y me toman el pelo, pero si lo llego a acertar me saco un viejo gusto”.
DISTINCIONES
Obtuvo la Copa de Honor Sr. Adrián
Beccar Varela (1932) y la Copa de Competencia (1933)
Juan Botasso prestigió el fútbol quilmeño, el
nacional y fuera de las fronteras de nuestro país. El
diario Clarín lo definió “siempre sereno,
correcto, siempre poniendo el pecho a los vendavales, defendiendo su meta con
valor temerario, con sus manos de garfio”. Otra crónica de entonces lo
destacaba diciendo “su agilidad y su
seguridad desconciertan a los rivales, que ya no saben para qué lado shotear
pues él solo cubre todo el arco”. Y la revista ‘El Gráfico’ tituló: “¿Es Juan Bottaso el mejor goalkeeper
argentino?”
Finalizó
su carrera en 1937, en Primera B, defendiendo la meta de su equipo, Argentino
de Quilmes, Alsina y Ceballos.
La Cortina Metálica tuvo un
reconocimiento popular en vida. Fue el 3 de septiembre de 1950. Esa tarde
Racing inauguró el ‘Cilindro’. Recibió una ovación inusitada. Se emocionó a tal
punto que no pudo contener las lágrimas; ya estaba gravemente enfermo. Murió
muy joven, tenía tan solo 42 años, un mes después de aquel merecido homenaje.
Mercedes Simone "La Dama del Tango" Con el
golero Juan Bottaso de Quilmes y de la Selección, En Mar Del Plata (Anotando Fútbol http://anotandofutbol.blogspot.com )
HACIENDO
MEMORIA
Siempre
ocurrió lo mismo. El arquero es considerado como un verdadero valor cuando
consigue - a costa de cualquier esfuerzo - mantener su valla invicta. Es que él
debe ser efectivo cuando todos fallan; él tiene que acertar cuando todos yerran:
debe estar sereno cuando todos están nerviosos y debe hacer, con su acción,
inútiles los esfuerzos de la delantera contraria. Para él los hombres llegan,
pero la pelota no debe pasar. Tal el caso del famoso guardavalla del Racing
Club Juan Botasso, (sic) a quien evocamos desde estas fotografías de nuestro archivo
y que por esa fecha era calificado como "el menos elegante, pero el más
efectivo". Y todos estuvieron de acuerdo.
Revista PBT, 03/1955 http://www.magicasruinas.com.ar
Compilación e
investigación Chalo Agnelli
Colaboración Prof.
Mora Camarero Deprati de Barati y
Mart. Domingo W.
Araujo
*En algunas
publicaciones el apellido aparece como Botasso y en otras como Bottaso, que es
el de familiares que aún residen en Quilmes.
FUENTES
Anotando fútbol - Quilmes Parte 9
Archivo de la Biblioteca Popular Pedro
Goyena.
Blog “Anotando Fútbol”:
http://anotandofutbol.blogspot.com
Gallego, Justiniano. ‘El Sol Deportivo’ del
sábado 9/7/1994 y del viernes 4/10/1996.
Hemeroteca del diario “El Sol” de Quilmes
Revista A.B.C. de Quilmes, 1927
“Un Caño” http://revistauncanio.com.ar
http://www.unidosporelmate.com.ar/
Wilkipedia
NOTAS
[1] Francisco Antonio Varallo nació en La Plata
el 5 de febrero de 1910 y falleció en su ciudad natal el 30 de agosto de 2010,
a los 100 años. Fue conocido por su seudónimo «Pancho» Varallo. Se desempeñó principalmente en el puesto de
delantero. Comenzó su carrera en el Club de Gimnasia y Esgrima de La Plata y posteriormente se trasladó al Club Atlético
Boca Juniors. Obtuvo cuatro títulos de la Primera División Argentina entre 1929
y 1935. El 15 de julio de 1930, debutó en la primera Copa Mundial de Fútbol y
triunfó ante Francia 1-0. En el segundo
partido, con México como rival, anotó uno de los seis goles de su equipo. Luego
se lesionó ante la selección chilena y no pudo incursionar en la semifinal
contra que Argentina ganó 6-1. Sin embargo, logró reponerse lo suficiente para
participar en la final del 30 de julio contra Uruguay que la selección
argentina perdió finalmente. El primer tiempo había sido ganado por Argentina
2-1, mientras que el segundo fue aventajado por Uruguay 4-2.Wilkipedia
[2] Ángel Bossio (1905-1978) se desempeñó como
arquero. Fue ganador de una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de
Ámsterdam 1928. Integró también la selección argentina que salió subcampeona
mundial en la Copa Mundial de Fútbol de 1930, jugando en tres partidos de la
serie clasificatoria. Dos veces campeón de América en 1927 y 1929. Bossio fue
llamado “la maravilla elástica”.Wilkipedia