martes, 28 de julio de 2015

"ALLÁ LEJOS Y HACE TIEMPO" EN HISTORIETA (1963 - 1979)

El 4 de agosto se conmemorara el nacimiento del primer escritor nacido en Quilmes, en la estanzuela "Los veinticinco ombúes", en tierras que desde 1891, pertenecen al partido de Florencio Varela, donde se había
establecido el matrimonio estadounidenses de Daniel Hudson y Caroline Kimble.
Gran parte de la obra de Guillermo Enrique Hudson pone en un pilar de relevancia a la pampa y al hombre que la habitó y desarrolló durante el siglo XIX, esas extensas llanuras, la Patagonia y la Banda Oriental.
Muchas fueron los trabajos literarios, ensayos, pinturas y hasta piezas musicales que inspiró la obra de Hudson, desde sus traductores, el Dr. Domingo Pozzo y su esposa Celia Rodríguez, hasta Juan Carlos Lombán en "Guillermo Enrique Hudson o el legado inmerecido", recientemente reditado por Buenos Aires Books.
A continuación se reproduce una adaptación de "Alla lejos y hace tiempo" en tiras de historieta, género artístico que en en nuestro país cobró notable figuración y Quilmes tuvo historietistas de relevancia como Oscar "Blottita" Blotta (1818 - 2007), Eduardo Carlos Ferro (1917 - 2011) el recientemente fallecido Osvaldo Walter Viola, "Oswal" (1935-2015), quien en una de sus últimas producciones ilustró “Una sombra maldita” novela juvenil de Miguel Ángel Morelli; versión libre de la obra “El Ombú” de Hudson. 
Estas tiras de historietas hudsonianas se presentaban en la última página del diario La Nación entre 1963 y 1979. Fue su creador el dibujante Eduardo Miranda.

Si bien Eduardo Miranda cultivó distintos géneros, en la historieta se identifica principalmente con dos de ellos: el gauchesco y lo que en una nota publicada hace unos años en Tebeósfera denominamos “divulgación histórica”, que tuvo también entre sus cultores a José María Taggino, Raúl Roux y Patricio Mc Gough.
Miranda nació en Buenos Aires en 1932. Tras finalizar sus estudios secundarios trabajó durante un tiempo como empleado de comercio. Su formación artística la realizó en la recién iniciada Escuela Panamericana de Arte o quizá en su antecesora, la Escuela Norteamericana de Arte, completándola luego en distintos cursos que se dictaban en la Asociación Estímulo de Bellas Artes. Los años sesenta marcan la consolidación profesional de Miranda y también de su dedicación al género gauchesco y la divulgación histórica, como lo demuestra con el
personaje “Rosendo Pampa”, también llamado “Rosendo el Toro”, que sobre guiones de Eugenio Mandrini dibuja en 1961 para Columba, editorial donde también realiza episodios de la serie “Hombres de fortines” y “El Montaraz”, con guiones de Gaby-Liara. En esa misma línea hace “El sargento Robles” en la revista Texas en 1963 y, contemporáneamente, en Misterix dibuja “Lisandro Laguna”, a los que se suma a partir de 1964, “Lucero Arroyo” creada para el King Features y cuyo material sería publicado posteriormente en una revista homónima dirigida por el mismo Miranda en la cual aparecían otros personajes suyos. Tras ese quinteto de personajes gauchescos que hemos enumerado, Miranda inicia la obra por la cual quizás más se lo recuerda, "Figuras de nuestra tierra”, historieta de divulgación histórica que en forma de tira diaria realizó en  La Nación entre 1963 y 1979 y en la cual evocó a más de cien personajes y hechos de nuestro pasado. Fue colaborador de los diarios El Mundo, El Siglo, Noticias Gráficas y en la revista Esquiú, donde entre 1974 y 1986 ilustró temas didácticos. Eduardo Miranda, falleció en 1990 (Carlos R. Martínez)



Esta reliquia formaba parte archivo privado del eximio hudsoniano profesor Juan Carlos Lombán (1927 - 2015), cuyos hijos legaron al Prof. Chalo Agnelli (quien suscribe)  y al "Museo y Parque Ecológico Cultural Guillermo Enrique Hudson", donde todos los 4 de agosto se honra su memoria, con diversos actos que se continúan en la Biblioteca Popular Pedro Goyena.


FUENTES
http://comicscolumba.blogspot.com.ar







1 comentario:

Noe dijo...

Buscaba hace rato información de este historietista. Me gustaba mucho esta técnica que, logicamente, se ha perdido, sobre todo de temas camperos y de nuestro terruño. Abrazos